En Sacramento falta identidad sin Mike Malone

Se ve un equipo sin espíritu ni defensa
Fuente: phatdunk.com

Hace unos años, el blog Basketbawful introdujo la expresión «dead coach bounce» para explicar el estallido de juego posterior a la destitución de un entrenador en medio de temporada. Quizás necesitemos acuñar algún término nuevo para describir lo que le está sucediendo a Sacramento Kings. Después del despido de Mike Malone y su sustitución por Tyrone Corbin, algo inexplicable para muchos, los Kings se están estrellando, más que estallando.

Con un balance de 14-19, Sacramento ganó el jueves en el Target Center por 110-107 ante unos mermados Timberwolves y el rookie Andrew Wiggins estuvo a punto de evitarlo. Esta fue su tercera victoria en nueve encuentros (récord de 3-6) bajo las órdenes de Corbin – las otras fueron ante Los Angeles Lakers por 108-101 y ante New York Knicks por 135-129 en la prórroga -, ninguna de las cuales fue muy impresionante. Particularmente tras la última, contra los Knicks, se pudieron escuchar unas demoledoras declaraciones de DeMarcus Cousins en KXTV News10. Se le ve extremadamente frustrado, y eso que fue una victoria, descontento con el equipo y especialmente con la defensa. De hecho, usó la palabra «frustración» y sus variantes una cantidad ingente de veces. Cabe decir que parte de esa frustración venía provocada por su reciente dolencia estomacal -después de sobreponerse a una meningitis vírica- pero también expresó repetidamente que quería que las cosas volvieran a ser como a principios de temporada:

«Tenemos que volver a ser el equipo de antes. Eso consiste en defender a alto nivel, orgullosos de basarnos en la defensa. No podemos ser un equipo que busque anotar más que sus rivales. No somos nosotros. Defendemos y nuestra transición defensiva supera a la ofensiva del rival. Tenemos que volver a ese tipo de baloncesto. Ahora estamos empeorando; tenemos que volver al camino correcto

Cousins se refirió a los cambios en los quintetos y al hecho de «tanta novedad» con el cambio de estilo, y dijo que Sacramento tenía que volver a su identidad. Dos noches después, Cowbell Kingdom publicó que los Kings habían firmado silenciosamente a Corbin hasta final de temporada, quitándole la etiqueta de interino. Entonces, DeMarcus declaró a los periodistas que él y sus compañeros se habían enterado de la renovación por los medios de comunicación cuando se hizo pública la información. Esa misma noche, en fin de año, Boston Celtics aniquiló 106-84 a los Kings, que solo anotaron un 37% de sus lanzamientos. Además, Cousins fue expulsado en los últimos minutos cuando recibió la segunda técnica por perder los nervios y lanzar al rookie Marcus Smart por los suelos (vía AllNBAHighlights):

http://www.youtube.com/watch?v=OFPG8aapllw

Desde que Corbin tomó las riendas del equipo, Sacramento está haciendo lo que su propietario y su General Manager querían, atacar: son undécimos en anotación y sextos en contrataques. Sin embargo, la defensa se ha derrumbado por completo. Los Kings son penúltimos en puntos permitidos por 100 posesiones en estos últimos nueve encuentros. DeMarcus Cousins es el único defensor relevante, pero con Malone, al contrario que ahora, los Kings eran disciplinados. El esfuerzo se notaba: eran físicos y excelentes en el rebote, al menos hasta la lesión de Cousins a finales de Noviembre. Nada de eso se puede volver a decir con el nuevo entrenador.

Al correr con mucha más frecuencia, los Kings pierden más balones. También, en general, se ve menos sintonía en el equipo. Normalmente, cuando un equipo intenta correr es más divertido de ver para los espectadores. Sin embargo, en este caso no se cumple. El periodista Zach Lowe señaló una posesión contra Minnesota en particular, una en la que se ve como Cousins está agachado, con las manos en las rodillas, mientras Rudy Gay penetra hacia canasta y pierde el balón:

https://vine.co/v/OdaP7622QPx

Este incidente, algo evidentemente aislado, no es un gran problema. La cuestión es que es indicativo de como funciona Sacramento. Los jugadores no creen en esta filosofía e intentar un cambio así a media temporada -cuando el equipo creía en Malone y jugaba mejor de lo esperado- parece un error imperdonable.

Sin embargo, siempre hay lugar para la esperanza: Sacramento está 1-0 en el 2015. Corbin tiene tiempo para cambiar las cosas, aunque los Kings tienen un largo camino por delante. El equipo que empezó la temporada 9-5 ha desaparecido. Veremos cómo de bueno termina siendo el que le sustituyó. 

DeMarcus CousinsMike MalonenbaSacramento KingsSomosBasketSomosNBATyrone Corbin
Comentarios (0)
Dejar comentario