Blake Griffin, una de las piedras angulares de Los Angeles Clippers, parece serlo esta temporada más que nunca. El jugador parece que ha dejado de lado su insistencia de machacar el aro partido tras partido para cambiar por un tipo de juego mas útil para sus compañeros en el que tira más y pasa mucho mas. ¿La razón? La fatiga.
En una entrevista a «The Players Tribune«, Blake reconoció que el tipo de juego que llevaba hasta hace unos años lo dejaba muy agotado para mitad de temporada: «El problema es que acabas muy muy cansado para cuando llegas a Febrero«.
El jugador tenía el mayor porcentaje de mates de toda la liga, llego a tener una proporción de 2,9 mates por partido en 2012, eso sumado al tremendo trabajo llevado a cabo durante el resto de la temporada, es muy lógico que no se llegue a los Playoffs 100% físicamente. Por otro lado también es cierto que cada vez que Griffin recibe un balón en la zona y tira desde media distancia o lleva a cabo un pase a uno de sus compañeros que se encuentran en una posición de tirar de 3 o un tiro de campo relativamente fácil, Griffin está perdiendo una oportunidad de llevar a cabo un mate y sumar otros dos puntos a su equipo junto con la consecuente desmoralización del equipo rival. Añadir que el jugador esta temporada tiene los mayores porcentajes de tiro de campo (41%) y tiros de 3 (38%) en toda su carrera.
Por tanto, ¿es realmente productivo el cambio que ha llevado a cabo Griffin durante estos años? La respuesta la veremos en la pretemporada cuando observemos el nivel físico de Blake durante esos partidos que ponen a prueba a los jugadores de más alto nivel.