Jason Richardson ha dejado entrever que su regreso a las pistas está más cerca que nunca. El segundo jugador más veterano (después de Kirilenko) del roster Sixer, espera estar listo para jugar un partido NBA inmediatamente inmediatamente después (21/02 contra Pacers) del All-Star Weekend.
«Tengo 34 años. Soy viejo, pero no tan viejo. Algunos jugadores en la liga tienen cuatro o cinco años más que yo. Todavía siento que puedo aportar mucho. He estado fuera durante dos años, por lo que dos he estado sin jugar una temporada en la NBA.»
El cuerpo de Richardson se ha librado del desgaste de un calendario de 82 partidos en estos dos años que ha estado inactivo (debido a lesiones en su rodilla y pie), pero el cuerpo también lo ha estado. La recuperación de un atleta de élite es una tarea difícil, y tener más de 30 años no ayuda.
«Creo que la parte más difícil es mi cuerpo. Mi cuerpo ha estado inactivo durante dos años. Estos dos últimos meses han sido los primeros desde que me operaron (rodilla) en correr, saltar, ir de arriba a abajo.»
Richardson ya ha participado en los 5 vs 5 que el equipo organiza en cada entrenamiento, y está a sólo 2 ó 2.5 kilos por encima de su peso registrado en la liga, que es de 112 kg.
Es realmente difícil decir qué tipo de papel tendrá en el equipo cuando regrese, ya que los Sixers están mirando hacia el futuro, y Richardson no está claramente en esos planes.