En un cierre de mercado NBA, sin movimientos de Lakers, las reacciones en su entorno más cercano no se hicieron esperar. Todo aquel medio. que se acercó al entrenamiento del equipo púrpura. pudo recibir sensaciones extrañamente optimistas, pese a que el equipo intentó la llegada de Goran Dragic , jugador que acabaría en Miami Heat, al final de la jornada de ayer.
Los primeros en mostrarse optimistas, fueron los jugadores que pudieron ser traspasados en la noche de ayer, y que al final siguen en las filas de Lakers. Jordan Hill y Nick Young se mostraron aliviados por seguir en L.A., e incluso bromearon, y contaron que fueron victimas, por parte de sus compañeros, de algún tipo de engaño. Al parecer, el resto de la plantilla, les habrían dicho que debían pasar por la oficina de Mitch Kupchak, el cual había reclamado su presencia.
Tanto Jordan Hill como Nick Young, afirmaron que habían tenido dudas de su continuidad en la franquicia californiana, que no supieron hasta el final si iban seguir en la disciplina purpura, al final de la jornada. Tras el Trade Deadline respiraron aliviados, pese a que son conscientes, que en el próximo verano las cosas pueden cambiar, nuevamente para ellos.
Llegaría el momento de preguntarle al entrenador, Byron Scott, el cual siguió manteniendo la misma reacción optimista tras un final de mercado, realmente, a cero para Lakers. Byron habló de grandes proyectos para la franquicia de L.A., que en ningún momento pasarían por reforzarse antes de verano, y que nada cambiaba esto.
Scott habló con entusiasmo, de los planes que le mostraron Mitch Kupchak y Jim Buss, hace unos meses. Se negó a dar mas información al respecto, pero dijo que todo giraba entorno a llegar a este próximo verano, sin grandes cargas salariales.
Byron fue mas allá, y le comento a la prensa, que él creía, que la continuidad de Kobe Bryant como jugador de baloncesto, dependía del bueno, o mal trabajo, que desde la oficina de Lakers se hiciese este verano, y el siguiente, para reconstruir la plantilla actual. Scott, también, reconoció que esto era lo que el creía, y que en ningún momento, lo había hablado con Kobe, pero que así lo espera.
Todas estas reacciones optimistas, desde dentro de la franquicia púrpura, a buen seguro, contrastarán con la negatividad y el pesimismo presente desde sus aficionados. Una afición que veía con buenos ojos la llegada de nuevas y buenas piezas, como lo hubiese sido la incorporación de Goran Dragic.
Parece que la explicación oficial de Lakers, al respecto, es que nada impedirá que los californianos lleguen a la próxima agencia libre con ataduras. Quieren tener el suficiente espacio salarial como para poder hacer buenas ofertas a las estrellas que estarán libres este próximo verano, e incluso pensarían en un proceso de dos veranos para ser un equipo con aspiraciones.
Sea como sea, el futuro de Lakers, pasa irremediablemente por el próximo Draft, donde los angelinos deben estar con una hipotética primera ronda Top 5, si no fuese así, la ronda acabaría en manos de los Sixers. Según los cálculos de algunos, a día de hoy, habría el 83% de probabilidades de conseguirlo, parece obvio que los angelinos confían en el mundo de la probabilidad, y una buena elección en el draft 2015, puede y debe ser, el mejor camino hacia la mejor de las reconstrucciones.