El alero de los Indiana Pacers, que volvió a las canchas hace apenas 10 días se rompió anoche en el partido que enfrentaba a su equipo a los Memphis Grizzlies y en el cual trataban de meterse en Playoffs a la desesperada.
La derrota sufrida por los de Vogel por 83-95 que les dejaba fuera de la lucha por el título no fue la peor noticia de la noche para los de Indianapolis. Después de haber disputado únicamente 6 partidos en su vuelta a las canchas tras la gravísima lesión que sufrió en el campus de verano de USA Basketball en la cual se partió la pierna derecha al tratar de taponar a su compañero de selección James Harden, Paul George se volvió a romper. Esta vez el alero notó una sensación extraña en su pierna izquierda, la sana.
Mediado el cuarto periodo el 13 de los Pacers hizo un movimiento extraño con su pierna izquierda y quedó tendido en el suelo teniendo que ser ayudado por sus compañeros para retirarse del campo ya que le era del todo imposible apoyar peso sobre la pierna afectada.
El jugador mostró su frustración tras el partido:
«Al salir de un bloqueo noté escuché un pop y sentí una sensación extraña en la pierna. No es una pierna rota pero es duro. Es muy duro el trabajar para volver, tras una rehabilitación muy dura en mi pierna volver a jugar y dañarme otra parte de mi cuerpo. Lo único bueno es que tenemos el verano por delante y mucho en lo que trabajar«.
Después de dos operaciones y un largo proceso de rehabilitación George volvía a las canchas el pasado 6 de Abril con una limitación de minutos de entre 10-15 por partido. El pasado martes los Pacers necesitaron de una prórroga para lograr la victoria ante los Wizards y George se fue hasta los 18 minutos de juego. Ayer, en el último partido de la temporada en el que los Pacers se jugaban un puesto en los Playoffs, Vogel tenía previsto dar más minutos a Paul George llegando hasta los 20, pero el jugador se rompió cuando apenas había disputado 15 en una jugada sin contacto.
«Lo sentí y supe que no era nada bueno».
Ahora tanto los Indiana Pacers como el alero afrontan un largo verano para preparar la próxima temporada en la que tratarán de volver a ser el contender del Este que fue capaz de discutir la hegemonía de los Miami Heat durante las dos anteriores temporadas.
«Es una gran motivación volver a ser el que fui, pero voy a ser inteligente. Quizás pequé de proteger mi pierna derecha (la que se rompió) cargando el peso sobre mi izquierda y esto hizo que me lesionara. Ahora me centraré en que ambas piernas tengan la misma fuerza para evitar que estos crujidos vuelvan a apartarme de la cancha de baloncesto».