Mala noche la última para los Golden State Warriors, el equipo dio una de sus peores versiones de la temporada y los Cavaliers consiguieron la victoria y llevarse la serie a Cleveland. Lo único positivo que se puede sacar es que pese al mal juego del equipo los Cavs necesitaron de una prórroga y de un gran LeBron para llevarse el partido, por lo que al parecer los Warriors que esta,os acostumbrados a ver, no deberían tener problemas contra unos Cavs mermados por las lesiones.
El entrenador de la franquicia de San Francisco, Steve Kerr, habló en la rueda de prensa tras el partido mandando un mensaje claro al equipo y los aficionados, como se suele decir en estos casos: «está permitido caer pero es obligatorio levantarse».
Kerr habló sobre el aspecto ofensivo:
Debemos mejorar en los movimientos sin balón, debemos colocar a nuestros jugadores en mejores posiciones para que puedan lanzar a canasta y conseguir buenos tiros.
Además el entrenador «Rookie» salió en defensa de la mala actuación de la estrella del equipo Stephen Curry:
A veces la pelota, simplemente, no quiere entrar, lo intentas y se vuelve a salir, está bien, debes seguir jugando e intentándolo. Lo que le ha pasado hoy a Steph le ha pasado a muchos otros jugadores, como Michael Jordan y Tim Duncan. Nadie es inmune a tener una mala noche.
Steve Kerr cerró su rueda de prensa con un mensaje rotundo:
Esto son las finales, se supone que tienen que ser duras.
Los Warriors cayeron la pasada madrugada, ahora les toca levantarse y conseguir ganar, al menos, un partido en Cleveland para poder volver al Oracle con la moral bien alta.