
Muchos equipos pujaron en la última agencia libre para hacerse con los servicios de LaMarcus Aldridge, uno de los mejores ala pívot de toda la liga y un verdadero All Star. Sin embargo, ese lujo solo pudieron dárselo los Spurs, gracias al gran trabajo en conjunto de jugadores, sobre todo los más veteranos y dirigentes. Por eso la franquicia de Texas ahora gozará de las virtudes de Aldridge sobre el parquét.
Por caso, el sentimiento del entrenador Gregg Popovich es enorme, y más ahora que está cada vez más cerca de iniciar el campamento de entrenamiento de una nueva temporada, con un jugador de primer nivel en el juego interior que tanto buscaba como lo es Aldridge. El ex Portland además de reforzar esta plantilla de primer nivel, será el encargado de tomar el cetro que deje la leyenda viviente Tim Duncan, cuando este decida retirarse.
Al respecto de LaMarcus, Popovich se manifestó de la siguiente forma:
«Obviamente que añadir un talento como el de él al equipo hace de esto una situación especial. Yo sólo voy a sentarme y verlo, para empezar a asegurarme de que no me equivoqué. Quiero verle jugar de cerca y personalmente.»
Pop solo desea confirmar que su elección fue válida, y lo más probable es que así sea. Los Spurs, el curso venidero, llegarán seguro muy lejos.