Al cumplir los 34 años y acumular 12 temporadas en el cuerpo, un jugador de la NBA como Luke Ridnour ya merece recibir el calificativo de veterano. Si a eso le sumamos el haber probado suerte en 6 equipos de la liga, estamos hablando de un tipo que entiende bien de qué trata este cuento.
Incluso para un jugador acostumbrado a los cambios de equipo como Luke llegan los momentos de tomar una pausa, y esto es lo que ha decidido en los últimos días. Luego de su paso por su último equipo de la NBA, que fueran los Orlando Magic, sucedió algo insólito en la agencia libre, su nombre fue transferido en menos de una semana a 4 equipos distintos para volver a quedar una vez más en calidad de agente libre, simplemente más allá de las tentativas no logró convencer a ningún equipo. Cansado de ser tratado como una simple moneda de cambio, el base nacido en Idaho ha decidido tomar un año sabático que le significará no estar presente en la próxima temporada. Hasta el momento nada se sabe sobre si esta pausa le significará tomar nuevos rumbos, esperar un tiempo por una oferta seria o bien colgar definitivamente la camiseta.
Para quienes han seguido la carrera de Luke sabrán que nunca ha sido un jugador deslumbrante, pero sí una excelente pieza en la rotación para cualquier equipo que permite no perder el ritmo de los partidos, lo que sí ha quedado en evidencia con el paso de los años son sus carencias a comparación con los nuevos bases atletas que se han tomado la pista. Avanzada la temporada y con las lesiones de por medio muchos equipos buscarán un base de emergencia, es ahí cuando los nombres como el de Ridnour se comienzan a extrañar.