A lo largo de su etapa profesional como entrenador, Brad Stevens ha demostrado ser un técnico cuya filosofía de juego se basa en el juego colectivo por encima de las individualidades. Esto implica esquemas ofensivos con mucha circulación de balón en los que los espacios cobran vital importancia, pero si no cuentas con buenos tiradores, estas ventajas en la cancha no marcan la diferencia.
Recientemente, el head coach de los Celtics ha comentado lo siguiente:
«Discutíamos sobre lo que es importante y entonces dibujé una canasta, una red y un balón. Si el balón no atraviesa la red, vamos mal. Si en cambio el balón acaba dentro de la canasta, te sientes bien y sabes que lo que estás haciendo va por el camino correcto.»
En referencia a esto, aparece una de las principales tareas a mejorar por el conjunto verde de cara a la próxima temporada. El ataque de Boston no puede depender tanto de Isaiah Thomas. El base de Tacoma es un jugador esencial para Stevens y es que desde su llegada al estado de Massachusetts el equipo ha experimentado un cambio radical. De hecho, se especula que el ‘bajito’ de los Celtics pueda ser titular, rol que abandonó la campaña pasada. Su presencia en la pista supone velocidad, tiro exterior y, sobre todo, rotura de las defensas para finalizar en bandeja (y otros recursos para anotar que veremos este año, según ha asegurado el propio jugador) o buscar al compañero mejor situado gracias a su creación de espacios. En definitiva, se necesita la mejor versión del resto de jugadores ya sea anotando los tiros exteriores, como capacidad de crear juego más allá de él (prácticamente Evan Turner fue el único que cubría tal requisito).
Stevens también habló acerca de esto último:
«Esté él (Thomas) en pista o no, vamos a jugar similar, pero no igual, como ya pasó la anterior temporada. Nuestro ataque puede estar dirigido a jugar contra tipos grandes, pero si contamos con Isaiah hay que aprovechar sus características y buscar espacios. Es importante rodearlo bien de tiradores, los necesitamos. La clave es esa, ¿tu tiro exterior es una gran amenaza para la defensa rival? Quizá no necesitemos que los cinco o cuatro cuando él esté en pista sean serias amenazas, pero tres de los cinco sí sería importante.»