Los entrenamientos de los Celtics están siendo muy intensos, y desde la dirección del equipo y el cuerpo técnico saben quien está marcando el ritmo. Desde el primer entrenamiento la competitividad ha sido extrema, algo lógico viendo el nivel similar de los jugadores, pero se ha llegado a ese punto de intensidad gracias a cuatro jugadores: Marcus Smart, Isaiah Thomas, Avery Bradley y Terry Rozier.
Los minutos en el backcourt se pagan a precio de oro y los chicos lo saben, pero lejos de crear una tensión nociva para el grupo, lo que esta haciendo es elevar el nivel de energía al máximo. Parece ser constante el «trash talking» entre esos cuatro jugadores, sobretodo entre Smart y Thomas, frases como «No puedes pararme» son habituales en las sesiones y están consiguiendo que ese nivel de entusiasmo se manifieste en los partidos, y ojalá dure.
Así lo ven los protagonistas:
«Entre ellos se motivan», dice Stevens. «Y eso es bueno».
«Creo que los tándems que forman nuestros guards son muy, muy competitivos y me encanta«, dijo Danny Ainge. «Con Marcus y Avery e Isaiah y Rozier. Están siendo muy competitivos, los cuatro han encajado realmente bien. Están compitiendo entre ellos y eso es beneficioso«.
«Nos estamos empujando unos a los otros», dijo Bradley. «Isaiah, Marcus, Terry y yo somos guards duros. Creo que todos somos como pequeños pitbulls, y creo que eso nos hace un equipo más difícil de batir. Cuando todo el mundo en el backcourt tiene esa mentalidad, la gente se alimenta de ella, incluidos nuestros hombres grandes«.
«Estoy entusiasmado de poder enfrentarme a estos chicos todos los días» decía Smart. «Esto sólo nos ayuda. Nos complementamos de muchas maneras, y todos somos diferentes, así que tener la oportunidad de enfrentarme a estos chicos es increíble».
«Tienes que ser duro o estos chicos van a tomar ventaja de eso«, dijo Rozier. «Tienes que encontrar la manera de hacer tus puntos y conseguir pararles. Uno no tiene más remedio que ser duro ahí fuera«.
La competitividad les está haciendo mejores, y eso hace que el equipo sea mejor. En el primer partido de la temporada en Milán, se pudo ver la intensidad de todos los jugadores, liderados por el backcourt, lo que hizo que el equipo dominará al rival. Esta es la base que se sentó el año pasado, y esperamos que continúe este.
DEFENSE! DEFENSE! DEFENSE!
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— Álvaro Méndez (@Almendiz) octubre 8, 2015