Los Celtics han pasado ya la mitad de su preparación previa al inicio de las actividades y en una primera instancia su itinerario los ha llevado al viejo continente para medir fuerzas con el Milán y el reciente campeón europeo el Real Madrid. En este viaje uno de los propietarios del equipo, Wyc Grousbeck, acompañó al conjunto de Stevens en sus días europeos y ha convivido con ellos a diario, lo que lo ha dejado con buenas impresiones tanto por la química de conjunto como por la predisposición al trabajo.
«Creo que ya he visto a 13 equipos desde que llegamos hasta ahora y este es tan bueno en energía positiva y en trabajo de equipo como los que hemos tenido previamente». No bromeo, el vaso está más que lleno con estos chicos. Son Celtics; están más que contentos de estar aquí y harán cualquier cosa por el equipo».
Grousbeck es consciente de las expectativas generadas por este equipo y las proyecciones de victorias que más de un analista le está pronosticando para éste año y trata de poner paños fríos, pero reconoció que espera que los jugadores den un paso al frente en este proceso de reconstrucción que está llegando a su tercer año al mando de Brad Stevens. Y gran parte de ese optimismo se debe a la química y la cohesión que ha visto en el grupo en este reciente viaje.
«Creo que Danny [Ainge] trajo algunos de estos chicos [con base en su deseo de ayudar a Boston en su reconstrucción]. No hemos traído “divas” si no chicos como David Lee y Amir Johnson que han estado un tiempo en la liga y saben cómo hacer las cosas. Y Marcus Smart y Avery Bradley, son tipos que no están preocupados por las estadísticas individuales y que no se ponen a hacer pucheros. Ellos van a tratar de conseguir el pase correcto para otro en mejor posición. Y eso me encanta, me gusta mucho lo que he visto y viví en este viaje”.
Wyc cree que este viaje fue muy bueno para lo que está por afrontar el equipo y que los va a ayudar en cuestiones de química y compromiso con sus compañeros.
“No tuvimos distracciones de la familia, amigos, esposas, novias, esas personas se quedaron en casa. Esto fue sólo sobre nosotros, y pudimos estar en un barco en el medio del lago de Como [en el norte de Italia] y subir a un hermoso restaurante”. «Y jugamos con un par de buenos equipos y rodeados de Celtics en las gradas. Te lo digo, legítimamente, sin vueltas, fue una muy buena semana.»
Wyc fue consultado sobre las expectativas reales que tiene con respecto a este nuevo conjunto Celtics y esto decía:
“Yo espero en este momento que seamos competitivos y que hagamos un básquet sin egoísmos, básicamente respetando el “Celtics pride”. Pero no voy a decir que somos contendientes, porque no lo somos. Pero solo por el momento. Estamos dando un paso más y estaremos pendientes de poder concretar algún buen trade si se presenta. Si no ocurre, el año siguiente tendremos tres primeras rondas y quizás cuatro y una buena profundidad en el plantel”.
El dueño de los Celtics sabe que sus jugadores tienen expectativas más grandes que las propias y no quiere que dejen de soñar en grande.
Cuando los Celtics se estaban preparando para el entrenamiento de ayer sábado, Grousbeck observaba a Isaiah Thomas practicar sus flotadoras a un pie (a lo Steve Nash).
“Mira a Isaiah practicar sus flotadoras a un pie. Él es un agregado de valor incalculable”. Danny y Brad me dijeron que si lo conseguíamos seriamos un mejor equipo y no se equivocaron”.
Wyc es muy optimista con respecto a sus jugadores y a su franquicia y las expectativas generadas por este conjunto de jugadores dan motivos suficientes para que así sea. Veremos si estas se concretan a lo largo del año.