Así, los Timberwolves, que contaban con 18 jugadores hasta el momento, han tenido que cortar a tres hombres para adecuarse a las reglas de la liga. Lorenzo Brown, que ya estaba en el equipo el año pasado, había sonado desde el primer momento como uno de los que no empezaría la temporada regular porque no tenía el contrato garantizado y con Tyus Jones como selección en el Draft… tenía los días contados, y así ha sido.
Los otros dos llegaron únicamente con acuerdos para el Training Camp, y ninguno ha impresionado lo suficiente al cuerpo técnico como para quedarse con un contrato garantizado. Ellos han sido Kleon Penn y el hermano del último ROY, Nick Wiggins. Es muy probable que ambos, e incluso también Lorenzo Brown si no encuentra otro equipo, se vayan a la D-League en busca de una nueva oportunidad avanzada la temporada. El principal problema es que los Timerwolves no tienen un equipo afiliado, por lo que cualquier equipo podría ofrecerles un contrato y reclutarlos en un futuro próximo.
Con estos tres cortes, el roster de los Timberwolves se queda en las 15 plazas máximas y se espera que no haya movimiento alguno de cara al comienzo de la temporada regular.