Sights & sounds from tonight’s #Nets vs. #Spurs matchup in San Antonio. pic.twitter.com/X0h4Q9tbNu
— Brooklyn Nets (@BrooklynNets) octubre 31, 2015
Una acción resumen el estado de estos Brooklyn Nets. Faltaban 20 segundos para concluir el partido, San Antonio había aplastado a los neoyorquinos en la segunda mitad con un parcial de 60-28, y ya no quedaba nada que hacer. Entonces, Lionel Hollins pidió tiempo muerto. No es que tuviera que dar ninguna indicación especial sobre la última jugada, totalmente intrascendente. Lo que hizo el entrenador de los Nets fue aleccionar a sus jugadores con un «Pasar la **** pelota», entre otras lindezas.
Y es que los Nets necesitan de un proceso de crecimiento. Necesitan de lecciones. Lecciones como la que se llevó el rookie Rondae Hollins-Jefferson. El ex de Arizona ha demostrado en tan sólo dos partidos que es una de las piezas centrales de este proyecto para el futuro.
Ante Chicago ya dio avisos del jugador que puede ser.
Y anoche ante San Antonio dio algunas muestras más, como esta gran acción defensiva ante Manu Ginobilli.
O esta otra ante el inconmensurable Kawhi Leonard.
Sin embargo, el alero de los Spurs le apuntó la matrícula, y pocos minutos después se vengó con una jugada sonrojante que a buen seguro quedará en la retina del rookie de los Nets.
Rondae acabó el encuentro con 10 puntos, 4 rebotes, 2 tapones y 3 pérdidas… y con una lección que no olvidará.
Y en eso están los hombres de Hollins: creciendo. Individualmente y como equipo. Anoche aprendieron cómo una mentalidad sólida puede hacerte ganar partidos. El propio entrenador de los Nets reconocía tras el partido que, pese al buen hacer de su equipo en la primera mitad, las cosas podían ponerse muy negras muy rápido tras el descanso.
«Antes de ir al vestuario, ya sabía que harían (los Spurs) esto«, dijo Hollins (via NY Post). «Esto es lo que saben hacer, especialmente en casa. A veces tienen inicios lentos de partidos, luego van a vestuario y Popovich les despierta para devolverlos a la pista. Esto es lo que hacen los buenos equipos. Ellos sabían que no lo habían tan bien como querían en la primera mitad y salieron a redimirse en la segunda.»
De la misma opinión era Jarrett Jack, que volvió ayer tras perderse el primer partido del Barclays Center. El base de los Nets informó tras el encuentro que no se había resentido durante el partido de sus molestias en el tendón de la corva y que lo único que había experimentado era «cansancio en las piernas». El de Georgia acabó con 12 puntos, 7 asistencias y 6 rebotes.
«The ball movement picked up for them & effort amped up. But I feel good, hopefully bounce back tomorrow.» #Nets pic.twitter.com/hoxMO1lXzc — Brooklyn Nets (@BrooklynNets) octubre 31, 2015
«El movimiento de balón les rescató y aumentaron su esfuerzo. Pero me siento bien, esperamos poder hacerlo mejor mañana (por hoy)», dijo Jack.
Con esta derrota, los Nets alargan su sequía en la pista de los San Antonio Spurs, que se alarga hasta el 2002, situándose el récord en un apabullante 4-39.
El que también alargó una racha fue Joe Johnson. El alero ha empezado la liga en una forma muy baja de rendimiento, y ayer sufrió de lo lindo para anotar una canasta en juego, el partido número 886 consecutivo en el que lo consigue. Para colmo, Johnson tuvo que ser atendido en el banquillo a mediados del último cuarto, cuando se le aplicó una bolsa con hielo sobre su mano derecha, aunque parece que no tendrá consecuencias para futuros choques.
Y hablando de manos frías, otro que ha empezado con la puntería sin afinar es Wayne Ellington.
Situado en estos dos partidos como escolta titular, el ex de los Lakers lleva 1 de 9 tiros, con un diferencial de -35 en los 30 minutos que ha estado en pista en los encuentros ante Spurs y Chicago.
Y si los dos partidos anteriores han sido ante rivales complicados, la dificultad seguirá manteniéndose en este inicio de liga regular. Esta noche, los Nets visitan la pista de Memphis Grizzlies, uno de los equipos más rocosos de la competición.
Otra nueva oportunidad para seguir ganando consistencia y creciendo como equipo… aunque probablemente será doloroso.