
Todo el mundo en la NBA sabe que Gregg Popovich es poco amigo de atender a la prensa o de hacerlo en buenos términos. Mucho menos de hablar de manera distendida. Por eso, pese a no ser la primera vez que lo hace, sorprendió que ayer dedicase buena parte de su comparecencia a elogiar al técnico rival durante la noche de ayer, el joven entrenador de los Boston Celtics, Brad Stevens.
«Realmente, tengo un respeto infernal por él. Es un muy buen y joven entrenador, con una gran conducta. Su equipo ejecuta muy bien lo que le pide. y va a seguir mejorando Así que lo disfruto»
Brad Stevens tenía solo 36 años cuando fue contratado por la franquicia de Massachusetts y en solo dos años -tres con este que empieza- ha conseguido ganarse el respeto de alguna de las mentes más preclaras de la liga. Estas declaraciones vienen a unirse a alguna ya recibidas el año pasado por entrenadores como Doc Rivers, Van Gundy o el propio Popovich que sorprendió al final de su entrevista con unas sorprendentes declaraciones:
«Realmente respeto lo que hace, si le soy honesto, todavía veo la cinta de Butler tratando de aprender algunas cosas que hizo allí»