Stauskas está decepcionando a la afición de Philadelphia. Llegó generando mucha ilusión, en un trade este verano con Sacramento Kings, pero las cosas no van tan bien últimamente.
La temporada anterior ya fue decepcionante para él. Sólo jugó una media de 15 minutos por partido, con una media de 4,4 puntos. No era ese jugador que habían drafteado, que tenía una impresionante mano desde la línea de tres. La presión de la NBA ha tenido culpa ahí.
Pero esto no está ocurriendo exactamente en los Sixers. Está jugando cada vez más minutos y los fans están empezando a apreciarle. Pero no todo es bueno. En los primeros cinco partidos ha promediado un 43% de efectividad, con un 39% en triples, también con unos más que interesantes 14,6 puntos por partido. En la zona también se mostraba capaz. Sin duda era un hombre más libre y versátil que en Sacramento.
Pero recientemente ha llegado su decadencia. En los dos siguientes partidos sólo fue capaz de promediar un 21% en tiros de campo, y lo mismo en triples. Esto se vio reflejado en una bajada en cuanto a anotación, bajando hasta los 6,5 pp. Los aficionados empiezan a acordarse de su pasado en los Kings.
Se tiene que encontrar una solución, pero si sigue jugando así y no mejora, deberá haber un cambio en el sistema y empezará saliendo desde el banquillo. Brett Brown ya lo ha hecho con Canaan, poniendo así a T.J. McConell de titular. Ahora quizás una solución sería volver a poner a Canaan en el quinteto, pero ocupando la posición de escolta, sustituyendo a Stauskas. Este puede ser un planteamiento útil, teniendo en cuenta que el joven base tiene además un mejor acierto desde la línea de tres.