Tras conocerse en la tarde de ayer que los Houston Rockets habían decidido prescindir de los servicios de su técnico Kevin McHale, ya suenan varios sustitutos para el cargo. De momento J.B. Bickerstaff será el entrenador interino mientras la franquicia tejana busca un sustituto -aunque según las últimas informaciones éste podría ocupar el puesto toda la temporada-.
Entre los candidatos en los que Houston estaría interesado se encuentra Jeff Van Gundy, quien actualmente es comentarista de la NBA para ESPN pero que confirmó hace poco que estaría abierto a la posibilidad de volver a la liga para ser entrenador. Van Gundy ya fue head coach de los Rockets de 2003 a 2007, consiguiendo un porcentaje de victorias del 55,5%, lo que le hizo convertirse en el cuarto entrenador más ganador de la franquicia tejana.
Otro de los aspirantes al puesto es Mark Jackson, quien tiene experiencia tratando con grandes jugadores. El que fuese entrenador de los Golden State Warriors contaría con el beneplácito de James Harden y Dwight Howard, quienes quieren a un técnico que les escuche y les permita tener algo de libertad en la pista.
También suena Steve Clifford, actual entrenador de los Hornets, que formó parte del staff técnico de Jeff Van Gundy durante su época en Houston y que acaba contrato con Charlotte a finales de temporada.
Pero sin duda el nombre que más fuerte está sonando es el de Tom Thibodeau. El ex técnico de los Chicago Bulls podría ser exactamente lo que los Rockets necesitan, un entrenador que le de importancia a la defensa, uno de los aspectos a mejorar por Houston esta campaña. Además éste tiene muy buena relación con la estrella del equipo James Harden, con el cual coincide en el Team USA, y fue visto en septiembre visitando el Training Camp de los Houston Rockets.
Tom Thibodeau, exentrenador de @ChicagoSeeRed, en el ‘training camp’ de los Houston Rockets. pic.twitter.com/qC4Ai0F0UP
— The Red Rocket (@TheRedRocket_) octubre 2, 2015
Sin embargo, uno de los principales problemas de firmar a Thibodeau sería la gran diferencia que hay entre él y Kevin McHale, temiendo que este cambio afecte demasiado a los jugadores y que tarden en acostumbrarse al sistema.