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— Brooklyn Nets (@BrooklynNets) noviembre 30, 2015
No fue bonito, pero una victoria es una victoria. Esto debieron pensar los jugadores de los Nets esta pasada madrugada, cuando vencieron por un ajustado 83-87 a Detroit Pistons en el Barclays Center, en el que era el primer partido de su tramo más casero de la temporada.
En un partido marcado por el poco acierto de cara al aro, con Detroit anotando tan sólo el 34% de sus tiros y Brooklyn el 43%, los Nets prevalecieron gracias a la aparición de Larkin y Ellington en el último cuarto, en un partido que acabaron sentenciando desde la línea de personal.
«Creo que todo se resumió a que estuvimos muy flojos mentalmente», dijo Stan Van Gundy tras el partido (via NBA.com). «Nos frustramos mucho, fallando tiros y pensando que nos habían hecho falta. Afectó a nuestra defensa. Creo que asumimos muchos tiros en mala posición porque estábamos más interesados en buscar la falta que en encontrar buenos lanzamientos. Simplemente creo que no jugamos de manera inteligente. Fue muy decepcionante.»
Andre Drummond estuvo de nuevo dominante bajo los tableros, consiguiendo 20 puntos y 18 rebotes, 10 de ellos ofensivos, pero su pésimo bagaje desde el tiro libre (2/11) acabó siendo un lastre para los suyos. Caldwell-Pope fue el máximo anotador visitante, con 21 puntos, pero no pudo suplir el mal partido de Reggie Jackson en la dirección. El base de Pistons acabó con 8 puntos, 9 asistencias y 6 rebotes, pero sólo anotó 4 de 20 tiros.
En el bando local, Young muy fue el más efectivo, anotando 19 puntos (con 9/12 en el tiro) y recogiendo 10 rebotes. Joe Johnson, con 13 tantos, y los comentados Larkin y Ellington, con 9 y 12 tantos respectivamente, también fueron nombres destacados. Mención especial merece Brook Lopez, que si bien vivió una noche aciaga en el tiro, con 6 de 18, aportó en todos los demás aspectos, sumando 9 rebotes, 5 asistencias, 5 tapones y 4 robos a sus 15 puntos.
Los primeros minutos del partido ya mostraron cual iba a ser la tónica general: fallos y más fallos. El marcador reflejaba un triste 8-7 para Detroit a mediados del primer periodo. Entre Drummond y los buenos minutos de Caldwell-Pope, los Pistons elevaron su producción, para ampliar la distancia hasta los 4 puntos, 22-18, al final del primer cuarto.
Los Nets se encomendaban entonces a Joe Johnson, que parecía recobrar por un momento la inspiración para anotar 9 puntos consecutivos para los Nets, que se ponían al frente, 24-27, en el minuto 17. Pero la segunda unidad de Brooklyn seguía con su estancamiento habitual de estos últimos partidos y ambos equipos se mantuvieron codo con codo hasta que unos fogonazos de Reggie Jackson volvieron a poner por delante a los visitantes, que se fueron al descaso con 6 puntos de ventaja, 41-35.
El parón no refrescó las ideas locales, que seguían viendo como su ataque estaba seco de ideas. El panorama no era mucho mejor en el bando visitante, pero estos conseguían sumar poco a poco gracias en gran parte a la labor de Drummond bajo los tableros. Las distancias se ampliaron hasta los 10 tantos, 58-48 para Detroit en el minuto 31, pero entonces, por fin, comenzó a carburar el banquillo de los Nets, con Ellington y Bogdanovic acercando a los suyos a sólo 3 puntos, 60-57 en el minuto 34. Sin embargo, 5 puntos consecutivos de Steve Blake serenaron los ánimos en Detroit, que seguía al frente al final del tercero, 67-59.
Pero si algo ha demostrado Brooklyn en estos últimos partidos es que, a falta de talento, lucha cada partido hasta el final. Y eso es lo que volvió a hacer. Ellington inició la ofensiva, con 7 puntos consecutivos para los suyos, y entre Larkin, Lopez y Young hicieron el resto. Los Nets dieron la vuelta al marcador y cogieron 5 puntos de ventaja, 76-81 en el minuto 44. Caldwell-Pope respondía con 5 puntos de su firma, y Drummond volvía a a poner los suyos por delante, 83-81, a falta de poco más de un minuto. Pero ahí acabó el fuelle visitante. Jack anotó un gran tiro en suspensión para empatar, y luego Lopez, el propio Jack y Young acabaron sentenciando desde la línea de personal ante el ahogo ofensivo de los hombres de Van Gundy.
«Definitivamente hemos tenido que trabajarlo mucho«, dijo Lopez al final del encuentro. «Nos mantuvimos firmes, y nuestro banquillo nos ofreció grandes minutos. Nos mantuvimos unidos y seguimos luchando, aunque las cosas no nos salían durante la mayoría del partido»
«Esto es lo interesante de esta liga», dijo Hollins. «Anoche en Cleveland jugamos muy bien y perdimos. Hoy hemos sido muy inconsistentes, con apenas 8 o 9 minutos de buen juego, pero nos vamos con la victoria.«
En el aspecto negativo para los locales, Bargnani sólo pudo disputar unos minutos de juego, tras reaparecer sus problemas en el muslo.
Los Nets se sitúan ahora 4-13 en la clasificación, mientras que los Pistons bajan del 50%, situando su balance en un 8-9.
Brooklyn recibirá a Phoenix Suns el próximo martes, mientras que Detroit recibe hoy mismo a Houston en su casa.