Greg Monroe se perdió los dos partidos posteriores a la gran victoria de los Bucks contra los invictos Warriors, uno contra los Lakers, donde se lesionó en la práctica de tiro esa misma mañana y el otro contra los Clippers el día siguiente. La resonancia magnética que se le practicó reveló que sufría un esguince de rodilla de primer grado. Tenéis el informe de la lesión aquí.
El jugador de Luisiana también sufrió un esguince de rodilla el año pasado cuando militaba en los Detroit Pistons, lesión que le supuso estar 11 días de baja. Si esta vez Monroe se pierde 11 días de competición, se perdería un total de 5 partidos, aunque él mismo ha comunicado a sus compañeros que espera volver en menos días de los que se perdió la temporada pasada y así ayudar a unos Bucks que están de capa caída.
El pívot de los Bucks comentó justo antes del partido contra los Clippers:
Recuerdo como me sentía la temporada pasada y esto no es comparable a aquello.
Así pues, esperemos que el jugador de los Milwaukee Bucks se recupere lo antes posible para ayudar al equipo de Jason Kidd a remontar un 10-17 agridulce y a subir de la decimotercera posición a, como mínimo, la octava, objetivo principal de los Bucks esta temporada.