Harrison Barnes, Festus Ezeli, Leandro Barbosa y, cómo no, Stephen Curry; esa era la larga lista de bajas para el partido de los Golden State Warriors en el American Airlines Center. Pero Walton todavía contaba con jugadores de la talla de Draymond Green, Klay Thompson, Andre Iguolada; el partido no iba a ser fácil para ninguno.
Quintetos iniciales:
Dallas Mavericks: J.J. Barea, Wesley Matthews, Chandler Parsons, Dirk Nowitzki, Zaza Pachulia.
Golden State Warriors: Shaun Livingston, Klay Thompson, Brandon Rush, Draymond Green, Andrew Bogut.
El partido comenzó con un intercambio de canasta donde los Warriors llevaban la batuta en el marcador y con un Nowitzki muy errado; pero un triple de Matthews dio a los Mavs un pequeño colchón de cuatro puntos que cambió la dinámica del partido. A partir de ahí los locales fueron aumentando su ventaja minuto a minuto. Pachulia se mantuvo como el amo y señor de ambas zonas y la energía de Powell y de Barea golpearon a los visitantes en el primer cuarto; con un 27-21 en el marcador. El segundo cuarto comenzó con un parcial de 8-0 a favor de los Mavericks, el ritmo ofensivo de los Mavericks fue tremendo y consiguieron hacer la mejor defensa de toda la temporada. Draymond Green estaba totalmente bloqueado y lo notaron demasiado sus Warriors; no tenía soluciones para salir del paso. Los de Carlisle se fueron hasta los 33 puntos en este cuarto por los 21, otra vez, de GSW; con el 60-42 y el +18 en el marcador los jugadores se fueron a los vestuarios.
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El inicio del tercer cuarto fue, sencillamente, demoledor; con Parsons como «asesino» silencioso y Barea, Pachulia y Nowitzki como ejecutores, los Dallas Mavericks llegaron a conseguir una diferencia de +30 que hizo caer al pabellón. Pero ese resultado fue tan breve como increíble; Andre Iguolada se puso el mono de trabajo y cogió los galones con 8 puntos consecutivos y Draymond Green arrancó completamente, haciendo sufrir a la defensa rival pero sin impedir que los locales aumentasen —aunque solo por un punto— la diferencia de cara al último cuarto. Nadie dudaba que si los Warriors conseguían un buen ritmo en los primeros minutos del cuarto cuarto iba a ver partido; pero no terminó de ser así y el cuarto duró 3 minutos; hasta que tres triples consecutivos de Felton, Barea y Nowitzki hicieron que Walton, pocos minutos después, ondease la bandera blanca. Los últimos 5 minutos fueron para jugadores como Justin Anderson, Jason Thompson, McAdoo, Jenkins… Fueron los minutos de la basura, pero los Warriors no pudieron maquillar en exceso el resultado, terminando con el 114-91 definitivo.
Por parte de los Dallas Mavericks, el mejor del partido fue J.J. Barea con 23 puntos (75% TC y 71% 3p), 6 asistencias y 3 rebotes. Pachulia estuvo imparable en la zona, ya había conseguido su doble-doble particular antes del descanso y terminó con 14 puntos y 15 rebotes. Dirk Nowitzki mejoró su mal inicio y terminó con 18 puntos y 8 rebotes con buenos porcentajes. Harris (13p) y Powell (10p) fueron los líderes del banquillo. Por último, también fueron destacables las actuaciones de Wesley Matthews; 13 puntos no son muchos para él pero paró, una vez más, a una de las estrellas de los rivales (Klay Thompson); y de Parsons que, con solo 5 puntos, hizo de todo y consiguió 6 rebotes y 5 asistencias.
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En el caso de los Golden State Warriors, el jugador más destacado fue Ian Clark con 21 puntos desde el banquillo; el resto de jugadores del roster no pasó ninguno de los 12 puntos, algo que deja en evidencia el mal partido que tuvieron en general. Nuevamente desde el banquillo respondieron dos jugadores, Speights e Iguolada consiguieron 12 puntos cada uno con un buen acierto; el problema estuvo más con las dos estrellas a falta de Curry, Draymond Green terminó con 11 puntos, 9 rebotes y 4 asistencias y Klay Thompson con 10 puntos —ambos con porcentajes en torno al 25% de acierto—. Para terminar con jugadores con cierta relevancia, el pívot australiano Andrew Bogut se quedó a un solo punto del doble-doble (9p y 10r).
Los Mavs ya tiene un récord de 19-13 y ha sumado su cuarta victoria consecutiva y viajan, en un par de días, a jugar a Miami. Por otro lado, los Warriors siguen con un récord impresionante de 29-2 y esta noche juegan en Houston contra los Rockets.