Jordan Hill volvió a a enfundarse la elástica de los Indiana Pacers ayer frente a los Detroit Pistons tras haberse perdido dos encuentros para poder quitarse una muela del juicio.
«Me miraron la boca con rayos X y tengo que quitármelas todas. Estaba ésta, la más profunda, que era la que más problemas me estaba dando.»
Hill ha estado jugando incómodo y con dolor en la boca durante aproximadamente un mes. Esa muela de la que Hill habla le estaba causando grandes dolores de cabeza, y es por ello que se sometió a la extracción de dicha muela. Confesó que no es por culpa de ningún golpe que le hayan dado.
«No ha sido ningún impacto,» explicaba Hill. «Simplemente era tiempo. La muela del juicio estaba saliendo mal, en una mala posición. Realmente dolía.»
«Intenté jugar con ello. Me tomé algunos ibuprofenos, algunos medicamentos para calmar el dolor.»
Lo cierto es que Hill estaba tratando de esperar lo máximo para someterse a la extracción de la muela. Su plan era realizarla en el parón del All-Star, pero finalmente el dolor acabó siendo tal que tuvo que quitársela cuanto antes. Tiene en mente, además, extraerse las otras tres, pero aún se desconoce cuando lo hará.
Hill está siendo una gran adición para los Pacers, promediando 10 puntos y 7’7 rebotes en los 28 partidos que ha jugado. Tanto es así, que su ausencia se notó en los dos partidos que no pudo jugar, perdiendo los Pacers ambos ante Chicago Bulls y Milwaukee Bucks