Los Dallas Mavericks está luchando a brazo partido por estar en los playoffs, motivados por los buenos resultados que están cosechando y la buena química del equipo. Les está llevando a cuotas que no se esperaba de ellos a principio de temporada. El buen rollo de los jugadores nos lo ha descubierto esta semana Dirk Nowitzki en un artículo en el Wall Street Journal. Dirk contó que antes del inicio de temporada le propuso a otro hombre alto del equipo hacer concurso entre ellos. Una apuesta muy particular que Zaza Pachulia aceptó encantado sabiéndose favorito.
El concurso consiste en quién conseguirá más mates en toda la temporada. La apuesta tiene su gracia al ser dos jugadores que no destacan principalmente por ser atléticos. Llevan 35 partidos y los mates de los dos juntos podemos contarlos como las campanadas de fin de año, 12 mates, 8 por parte de Pachulia y 4 de Dirk.
Los mates de Nowitzki se han convertido en una fiesta y una algarabía en el banquillo de los Mavericks, sobre todo sabedores del concurso y la escasez de mates que realiza. Una faceta del juego por la que nunca destacó en su carrera.
Pero nunca ha perdido la esperanza de alcanzar a Pachulia en breve tiempo. Pachulia sin embargo en este apartado se siente ganador, por jugar más cerca del aro, y que Dirk cada año juega más alejado de la zona. Pero hay otro apartado en el que da a Nowitzki como ganador, el jugador peor vestido de la NBA.