Tras un esperanzador arranque, los Celtics se encuentran actualmente en el peor momento de la temporada. Cuatro derrotas por una sola victoria en los últimos cinco partidos es el balance del equipo entrenado por Brad Stevens. Y la preocupación no surge simplemente por lo que implica perder partidos, sino por cómo y frente a quien se han producido las derrotas. Especial mención a aquellas que han tenido lugar en el TD Garden: Los Angeles Lakers, Brooklyn Nets (últimos y penúltimos de sus respectivas conferencias) y Detroit Pistons (intensidad mostrada no acorde con lo que suponía el partido).
Durante estos días se ha tratado de buscar motivos a la negativa racha que experimenta el equipo. En estos partidos ha brillado por su ausencia los pilares básicos de esta plantilla (defensa, intensidad, actitud), se ha observado el problema que hay con las rotaciones y queda patente la dificultad del equipo para cerrar los partidos. Pero también hay un factor que se le ha dado menos importancia de la que debiera: Avery Bradley es vital en estos Boston Celtics.
El escolta con el #0 a la espalda se ha consolidado como una fuente fiable de puntos en una plantilla que no destaca por su talento ofensivo, asegurando más de 14 puntos de media por partido en las tres últimas temporadas. Pero su presencia en la cancha va más allá. En la presente campaña, los Celtics presentan un 104.6 offensive rating* con Bradley en pista, cifra alcanzada por equipos como Cavaliers o Hawks. Sin embargo, sin él, el equipo promedia 95.8 offensive rating, valor que alcanza otros equipos como Lakers o Sixers. ¿Ha sucedido algo nuevo en estos tres últimos partidos que no se ha podido contar con Bradley? Negativo: 96.7 offensive rating.
*offensive rating: puntos conseguidos cada 100 posesiones.
Su impacto sobre la pista es tal que la gran mayoría de sus compañeros se ven beneficiados de su juego. A modo de ejemplo, Evan Turner aumenta su ratio de asistencia/pérdida de 1.5 a 2.5 mientras que Jae Crowder pasa de un 27.8% a un 40% en triples. A continuación se muestra la diferencia de offensive rating del equipo cuando Bradley está en pista con cada uno de los siguientes jugadores:
- Crowder: +5 offensive rating (712 minutos compartidos)
- Thomas: +8.5 offensive rating (656 minutos compartidos)
- Sullinger: +10 offensive rating (563 minutos compartidos)
- Turner: +7.9 offensive rating (428 minutos compartidos)
- Olynyk: +6.2 offensive rating (325 minutos compartidos)
- Lee: +11.7 offensive rating (232 minutos compartidos)
- Jerebko: +17 offensive rating (162 minutos compartidos)
- Smart: +9.9 offensive rating (108 minutos compartidos)
Estos sorprendentes datos pertenecen al plano ofensivo, pero no debemos olvidar que Avery Bradley es una referencia defensiva del equipo. De hecho, los jugadores tiran un 5.8% peor que sus medias cuando se enfrentan a Bradley, según SportVu.
Otro jugador fundamental en el apartado defensivo es Marcus Smart. El combo guard de segundo año está experimentando una irregular temporada debido a sus problemas físicos. Su entrega cada partido es indudable, pero está recibiendo críticas por su acierto de cara al aro. Esta temporada está promediando un pobre 32% en tiros de campo con un desastroso 22% en triples, arma que supo manejar en su año rookie. En la franquicia de Massachusetts saben que deben ser pacientes con él. Sus continuas lesiones estos años han hecho que su juego sea menos agresivo (ofensivamente hablando). Muestra de ello es que esta temporada el 46% de los lanzamientos que realiza son desde más allá del arco de tres puntos, mientras que solo un 27% son en forma de entradas a canasta. Por tanto, se espera que si las lesiones lo respetan vaya recuperando confianza para encarar el aro con más fuerza.
Aunque en la lista anteriormente mostrada se pudo contemplar que la pareja protagonista de este artículo solo ha compartido 108 minutos esta temporada (han coincidido en tan solo 10 partidos por motivos de lesiones), se puede sacar más conclusiones que la mostrada con el offensive rating. Si tenemos en cuenta lo que supone ser los mejores defensores del perímetro del equipo (bailar con la más fea) se puede entrever otras mejorías que el equipo aprecia cuando ambos jugadores están sanos, aunque no estén compartiendo pista. ¿Qué significa esto? Si cuentas con tus dos mejores defensores para frenar al guard estrella del equipo rival, éstos podrán repartirse la labor y no sufrir un sobreesfuerzo que te impida rendir bien a la hora de atacar. Cuantitativamente, esto se refleja así:
- % tiros de campo de Bradley cuando Smart NO juega ese partido: 41.52%
- % tiros de campo de Bradley cuando Smart juega ese partido: 44%
- % tiros de campo de Smart cuando Bradley NO juega ese partido: 23.4%
- % tiros de campo de Smart cuando Bradley juega ese partido: 35%
Como se puede observar, en el caso de Smart la mejora es notable.
Quizá con un traspaso adecuado todos los problemas enumerados al comienzo del texto serían paliados, pero es bien sabido que la tarea de mover fichas va a ser muy compleja. En resumen, los Boston Celtics debe mejorar en muchos aspectos si quieren pelear por los deseados playoffs que tan caros van a estar este año en su conferencia. Pero de momento, lo más importante para el equipo es el regreso de Avery Bradley.
Completamente de acuerdo con este articulo,con unas cifras que lo dicen todo,muy buen articulo Amador,no tenia esas estadisticas pero se ve claramente en el juego lo importantes que es Bradley en el juego de el equipo,y es una pena porque si nos quedamos sin el,el resto de jugadores no son capaces de guiar al equipo,tambien Marcus es muy importante y lo estamos notando mucho,todo empezo este verano con la primera lesion(ademas de los problemas del año pasado),y parece que no le respetan las lesiones,confio que poco a poco se vaya solucionando todo,ya que con estos 2 jugadores el equipo crece muchisimo.