La temporada de los Pelicans, hasta el momento, esta siendo una de las mayores decepciones de la NBA. Varias son las razones para este desalentador 11-25. A las lesiones, que masacraron al equipo a principios de temporada (y siguen, con Pondexter out hasta el final de la misma), se le suman varios nombres individuales, personalizados en el GM del equipo, Dell Demps, el nuevo entrenador Alvin Gentry, y si miramos dentro de la cancha, un nombre nos llama la atención, Omer Asik.
El turco, que viene de firmar un suculento contrato este verano (5 años por 57 millones), esta siendo uno de los factores más decepcionantes de New Orleans esta temporada, y sin duda el jugador de peor rendimiento hasta el momento.
Empezó la temporada arrastrando una lesión que le impidió estar al 100%, luego intentó sin éxito encontrar un sitio en la rotación de Gentry y, cuando lo hizo, jugó realmente mal. Esto, añadido al contrato que firmó este verano (con el que muchos aficionados no estuvieron de acuerdo desde el primer día), lo han convertido en el chivo expiatorio de muchos periodistas y fans del equipo de Louisiana, que personalizan en él sus frustraciones ante el pobre inicio del equipo. Sin embargo, y de una manera muy lenta, parece que el rendimiento de Asik esta empezando a mejorar.
En los últimos 6 partidos, ha conseguido un balance de más/menos positivo en tres ocasiones, solo superado por Eric Gordon, cuyo impacto ha sido positivo para su equipo en 4 de los últimos 6.
En estos mismos 6 partidos, Asik promedia 6’5 rebotes por partido, lo que supone un aumento de 2 en el promedio de la temporada. El trabajo sucio de proteger y limpiar la zona es algo más difícilmente cuantificable. Los Pelicans son el 24º equipo de la NBA en rebotes, lo que confirma que ahí dentro los hombres grandes no están haciendo una buena labor, sin embargo Omer Asik ha sido de un seguro de vida en sus equipos en este apartado, y estos rankings, con él en mejor forma, solo pueden ir a mejor.
Defensivamente, las cosas van mejorando ostensiblemente con él en pista. En la zona, está rebajando con su presencia el porcentaje de tiros de sus rivales un 2’7 %, acorde a los datos de SportsVU stats.NBA.com. Ofreciendo esa defensa interior, provee al equipo de unas mejores prestaciones defensivas en general. Sin contar la última prorroga en L.A. contra los Clippers, en lo que llevamos de enero, con Asik en pista, el índice defensivo es de 89’2. Sin sus prestaciones el equipo empeora ostensiblemente, 97’2. Aparte, hay jugadores que parecen más tranquilos teniendo al turco patrullando por la zona, y la defensa de perímetro también es más eficaz como consecuencia de este trabajo.
Con las lesiones ya olvidadas, y que le hacían perderse en la pista corriendo arriba y abajo siguiendo el alto ritmo ofensivo propuesto por Gentry, podemos ver a un Asik que solo puede ir mejorando e incrementando sus minutos mediante pasen los partidos. En su último partido, en la cancha de los Clippers, realizó una actuación más que decente, con 8 puntos y 11 rebotes en 26 minutos, dejando a DeAndre Jordan en 12, 11 en 42 minutos.
Estas mejoras aliviarán un poco a los altos cargos del equipo, que ya no verán al turco como un gran error cometido en los despachos. Si su mejora en el juego se plasma claramente en la segunda mitad de la temporada, su contrato puede que deje de ser visto como una gran equivocación, después de todo.