
Las votaciones populares para escoger a los titulares de los quintetos de las dos conferencias para el próximo AllStar Game en Toronto han terminado y el veredicto ya ha sido desvelado. Pese a la intensa campaña puesta en marcha por la Federación Italiana de baloncesto y muchos medios del país transalpino, mucho más activos e implicados que la prensa de Denver, el mejor jugador italiano del momento no ha conseguido los votos necesarios para formar parte del quinteto base.
Pese a esto, el hombre-franquicia de Denver sigue esperando una llamada como reserva por parte de los entrenadores para poder cumplir el sueño de convertirse en protagonista en la gran noche de la fiesta del baloncesto mundial:
“Me encantaría, es un sueño que tengo. Sería el primer italiano en conseguirlo, es algo que está en mi cabeza. No sé si será este año, pero espero que suceda algún día”
Gallinari es el máximo anotador de los Nuggets, con un promedio de 19 puntos por partido, estadísticas que se inflan aún más si se consideran los partidos disputados durante este mes de enero: 23.5 puntos por partido. El alero de la franquicia de Colorado es el máximo anotador europeo de la temporada y el segundo extranjero, tras el canadiense de los Wolves Wiggins. Gallo está anotando más que Nowitzki, Vucevic, los hermanos Gasol o Giannis Antetokounmpo, entre otros.
Coach Malone ya expresó su opinión a propósito, declarando que ahora mismo Danilo merecería una llamada para la gran parada de estrellas, y de la misma opinión se confesaron también el seleccionador italiano y entrenador ayudante de los San Antonio Spurs Ettore Messina y el seleccionador de España, el también italiano Sergio Scariolo, entrevistado a propósito por La Gazzetta dello Sport:
“Estoy contento de que Danilo esté viviendo una gran temporada. He tenido la suerte de trabajar con él algunos meses y me he dado cuenta en seguida de su gran fortaleza mental y de la capacidad de entender las situaciones y superar las adversidades con determinación y concentración. Estas cualidades, unidas a su talento, le hacen un jugador AllStar a todos los efectos; estoy convencido de que su carrera se hubiese desarrollado en equipos más competitivos y habituales de los play-off, seguramente ya habría participado en alguno, pero quizás este año sea el bueno, pues se lo deseo: se lo merece, no solo como jugador, sino también como persona”.
Cierto es que en el baloncesto uno siempre se queda con la última jugada, y la última imagen que tenemos ahora mismo de Gallo es la de anoche: fallando el triple decisivo que habría valido la victoria de sus Nuggets frente a los Grizzlies, pero la pelota no entró. No cabe duda de que, como jugador-símbolo de estos Nuggets en plena fase de reconstrucción, le tocaba a él tomarse la responsabilidad del último tiro: no fue bien y con autocrítica y humildad Gallo sabe aceptar las consecuencias. Como gran campeón que es, seguramente tendrá la ocasión de resarcirse pronto.
Preocupan efectivamente sus calos de rendimiento entre primeras y segundas partes, de hecho Malone ya comentó algo a este propósito tras el encuentro frente a los Thunder:
“Efectivamente nos está pasando que Gallo domina completamente nuestro juego en las primeras parte de los encuentros, en los cuales nos mantiene vivos anotando muchos puntos, pero en las segundas partes nos cuesta más encontrarle y no resulta tan efectivo. Él sabe que tiene que mejorar en este aspecto, y yo también, tengo que asegurarme de que el equipo juegue para meterle en mejor posición para anotar más y más canastas determinantes”.
Malone y Gallinari han declarado en varias ocasiones que conversan mucho entre ellos intentando buscar juntos soluciones para mejorar el juego del mismo jugador y del equipo en general. Bueno, no nos queda que esperar que el coach y su pupilo encuentren la clave para que el azzurro anote con la misma intensidad durante los 4 parciales de cada encuentro, entonces sí que hablar de play-off para Denver y de AllStar para Gallo no sería una herejía, sino una bonita realidad. Go Gallo, Go Nuggets!