Los New York Knicks recibían a los Thunder con la baja de Carmelo Anthony pero recuperando al ex jugador del equipo visitante, Lance Thomas. Por parte de los Thunder volvía al quinteto titular Steven Adams.
En una noche que se predecía muy dura para los neoyorquinos, debían bailar con dos monstruos como Kevin Durant y Russell Wesbtrook. El primero no tendría enfrente a Carmelo Anthony, que defiende más que bien y, sobre todo, desgasta más en su ataque. Por si eso no fuera poco, Russell Westbrook era uno de los favoritos para tener un buen partido. Siempre se le dio bien el MSG y además estos Knicks conceden mucho a los backcourts rivales, y Westbrook es un hombre que no suele desaprovechar ese tipo de ocasiones.
El primer cuarto empezaba con muchos ataques a la pintura por parte de ambos equipos. Las defensas se cerraban ante la ausencia del tiro exterior y se empezaron a ver rápidamente varios viajes a la línea por esas penetraciones que, a veces, se transformaban en faltas. Los Knicks se encontraron más cómodos de lo que cabía esperar en ese juego con muchas idas y venidas, con ataques muy cortos y muchas transiciones. El partido tenía un ritmo tremendo y Porzingis destacaba para los locales en ambos aros justo antes de hacer su segunda falta que le sacaba del partido, mientras RW ya hacía de las suyas con un gran mate. Al final del 1Q y tras un duelo final muy bonito entre segundas unidades, el marcador era de 38-34 para los Thunder.
El rookie Jerian Grant estaba teniendo grandes acciones en el partido, así como también lo hacía el base rookie de los Thunder, Cameron Payne. Sin Russell Westbrook ni Kevin Durant en pista, el parcial era altamente favorable para unos Knicks que no desperdiciaban la ocasión de ponerse por delante. El banquillo de los Knicks estaba siendo un factor clave en el partido y les permitía tomar una ventaja interesante pero los Thunder apagaban el fuego llegando al ecuador del 2Q. Sin embargo eso no hacía recular un ápice a unos Knicks muy guerreros. El quinteto titular de los Thunder estaba aportando bastante aunque no lo hacía así un banquillo desbordado por los Knicks, especialmente en cuanto al backcourt pues Galloway y Grant estuvieron especialmente acertados.
Se notó mucho también la vuelta de Lance Thomas y los intangibles que aporta a este equipo. Al descanso nos marchábamos 61-63 para los Knicks.
La segunda parte parecía calcada a la primera en cuanto al juego, con errores y pérdidas notables haciendo posibles las transiciones que los Thunder no desaprovechaban para meterse en el marcador en cuanto los Knicks hacían amago de despegar. De la mano de Westbrook y Durant los Thunder abrían hueco en el marcador, pero los Knicks no se rendían y tiraban de casta para mantener en ataque lo que sufrían atrás. Tras otro final de cuarto con el banquillo de los Knicks como protagonistas, nos íbamos al final del 3Q con 88-91 en el marcador, gracias a un tapón final de Seraphin sobre Durant.
Los Knicks amenazaban con dejar a OKC sin la victoria con una ventaja de 7 puntos nada más empezar el 4Q, provocando el TM de Donovan a falta de 10:36 para el final. Sin embargo la reacción no llegaba y pedían otro tiempo muerto muy rápido con los Knicks 11 arriba en el marcador. ¿Se avecinaba tormenta?
Los Thunder empezaban a despertar y en apenas unos minutos y aún sin KD ya se habían puesto a 5 puntos. Pese a un intento de arreglo de los locales, las bromas eran pocas para un Westbrook, que muy desatado, ponía a su equipo a sólo 3 puntos. A los Knicks se les mojaba la pólvora en el peor momento y los Thunder sacaban provecho de ello empatando el partido a falta de 4 minutos.
Sin embargo había un hombre dispuesto a cambiar las cosas, y es que Kristaps Porzingis seguía activo en todas las defensas, siendo muy importante para los Knicks en los momentos finales. El problema, es que otro que vestía de azul pensaba lo mismo, y Kevin Durant mantenía a los suyos con sus grandes acciones individuales.
Tras grandes defensas y acertando en ataque un parcial de 7-0 para los Knicks les ponía 4 arriba a falta de un minuto de juego. Sin embargo los Thunder iban a reaccionar a tiempo y a falta de 16 segundos Durant ponía el empate y Afflalo fallaba la canasta decisiva. Nos íbamos a la prórroga.
En la prórroga de nuevo Durant se encargaba de dejar las cosas claras: la victoria tenía que ser de los Thunder. Se llegaba de nuevo al clutch time cuando un triple de Galloway ponía a un punto a los Knicks a falta de algo más de un minuto. A falta de 35 segundos y con el marcador 122-119, los Knicks tenían bola para intentar empatar. Galloway iba a la línea pero sólo conseguía anotar un TL. Tras una falta dudosa Durant anotaba 2TL que ponían la sentencia en el MSG predecesora de una serie de TL infinita hasta llegar al marcador final de 128-122.
Los mejores en los Knicks fueron Langston Galloway, con 21 puntos, 5 rebotes y 3 asistencias; Kristaps Porzingis con 15 puntos, 5 rebotes y 2 tapones y sobre todo una gran aportación como bloque, sobreponiéndose a la baja de Carmelo aunque quizá estos Thunder (sobre todo los dos bichos) fueron demasiado para ellos. Peleones como nadie pero… Sin líder claro en momentos decisivos.
Por los Thunder el mejor fue Kevin Durant con 44 puntos, 14 rebotes y 5 asistencias. Westbrook hizo otros 30 puntos además de 8 rebotes y 10 asistencias. También habría que destacar el partido de Ibaka con 12 puntos, 17 rebotes y 2 tapones o la aportación clave de Payne en momentos duros desde el banquillo.