Posiblemente no haya reto más difícil actualmente en la NBA que enfrentarse a los Warriors; y, concretamente, defender a Stephen Curry. La exigencia es aún mayor cuando se trata de alguien como Josh Richardson, quien hasta hace dos días era uno de los guards con menos minutos en Miami.
Sin embargo, la inesperada lesión de larga duración de Beno Udrih, le ha abierto las puertas de la segunda unidad, con toda la responsabilidad que ello conlleva. Por supuesto, cualquier jugador en tal situación estaría entusiasmado, ¿pero cuál sería nuestra cara al ver que tu primer partido no va a ser sólo contra Golden State, sino que además tendrás que «frenar» a Steph Curry?
Obviamente, Curry impuso su ley al final. Se ponga quien se ponga en frente, incluso aunque su equipo pueda estar perdiendo, acaba haciendo lo que le dé la gana. El de Akron se fue a los 42 puntos, si bien tuvo que trabajárselos mucho al igual que Thompson sus 33 tantos, cuando eran defendidos por Richardson, quien estuvo motivadísimo y peleándolo todo. Además de ser uno de los que mejor +/- tuvo, con -3 (Wade se fue con -13 y Dragic con -3 también), añadió 15 puntos rozando la perfección: 5/6 en tiros de campo, con 3 triples sin fallo, y anotando los dos tiros libres que lanzó.
Es cierto que Curry y Thompson anotaron 75 puntos entre los dos, pero seamos sinceros. ¿Se le puede pedir más ante el dúo más demoledor actualmente? De hecho, cuando encajó uno de los triples desde el infinito cuando defendía a Curry, nadie pudo recriminárselo. Sencillamente no se le podía defender.
«Ni siquiera lo llamo una mala defensa. Es uno de esos momentos de Curry. Lo hace habitualmente, cosa que nadie más es capaz de hacer. Es normal que haya pasado», decía el propio Richardson.
También se llevó los elogios del propio Curry, quien reconoció su gran intensidad:
«Es muy peleón, y además anotó buenos tiros para ellos. Sé que va a tener que jugar muchos minutos por las lesiones, pero estoy seguro de que va a ser capaz de salir ahí y causar buena sensación. Si está en la liga, es por algo».
Esperemos que sea cierto, y que las lesiones dejen de cebarse con Miami, pues si la mala racha continúa no extrañaría nada que acabáramos viendo a los Skyforce de la D-League jugando en lugar de los Heat.