En el momento en que LeBron James terminó su octava temporada de la NBA en 2011, había acumulado una gran cantidad de logros en su palmarés: dos premios de MVP, dos finales de la NBA, cinco veces en el mejor quinteto del año, siete veces nombrado All Star y el premio de RoY. A pesar de todo lo obtenido por The King, su conjunto de habilidades en la pista no estaba completo. En ese momento de su carrera su porcentaje de tiro exterior estaba bastante por debajo de la media de la liga, además LeBron no tiraba en exceso de tres. Esta es la prueba de que aunque seas el mejor jugador de la liga, siempre puedes mejorar algún aspecto de tu juego.
Su tiro de tres mejoró mucho en la temporada 2011-2012, casualmente en la que se proclamó por primera vez campeón de la NBA militando en Miami Heat. James pasó de promediar un 30% de acierto desde el arco a más del 40% en ese año. Dicho de otra manera, LeBron pasó de tener un acierto desde el perímetro parecido al de la media de la liga a entrar en el top de tiradores.
En 2013-14, más de la mitad de los intentos de 3 puntos de LeBron fueron pull-ups, es decir, tiros complicados y su porcentaje en esta temporada descendió levemente (38%). En 2014-15, ya con Cleveland, su porcentaje siguió bajando hasta un 35,4% de acierto. Los expertos culparon a la selección de tiro de James, este lanzaba cuando estaba muy bien defendido e intentaba tiros muy complicados desde el perímetro. Con respecto ya a la campaña actual, LeBron sigue jugando en la élite de la liga, sin embargo, su porcentaje de tres le ha abandonado, James tira cada vez menos y en lo que llevamos de temporada está promediando un pobre 28%. Este dato le coloca entre los 16 peores tiradores de tres de la NBA en esta temporada.
A continuación podemos apreciar como han bajado sus porcentajes de la temporada pasada a la actual:
Estas recaídas en el tiro, para los grandes jugadores, suceden de vez en cuando, pero no a menudo. Al comenzar la temporada, las estimaciones de acierto en el tiro exterior para LBJ estaban cercanas al 36%, por ahora, no se están cumpliendo.
Desde que la NBA introdujo el tiro de tres puntos en el año 1979-80, 822 jugadores han tenido una temporada con un número de intentos parecidos al de James o superior. Sólo 10 (1,2%) han tenido un bajón tan grande en el acierto como LeBron. Uno de esos 10 jugadores es Kyle Korver, el tirador de Atlanta Hawks, que ha caído en un 11% su acierto desde el perímetro esta temporada. Aún así, el porcentaje de Korver sigue siendo superior a la media de la liga. Históricamente hablando, es de esperar que un jugador de la NBA pueda experimentar este tipo de caídas una vez cada dos o tres temporadas
Aún así, una bajada de acierto como la de LeBron James sigue siendo bastante rara, como se puede apreciar en el siguiente gráfico, que nos marca el porcentaje de acierto que presentan los jugadores que han lanzado más de 175 triples en esta temporada, frente a la estimación previa al comienzo de esta que se les otorgaba, entre 1980 y 2016:
Entonces, ¿cuál es la causa de la regresión repentina de James detrás del arco? Desde luego, no es un aumento en el volumen de lanzamientos de largo alcance. Sus lanzamientos de 3 puntos, actualmente, constituyen una proporción menor del total de sus tiros, es decir, cada vez lanza menos tiros exteriores. Tampoco se trata de una cuestión de ubicación. En realidad, podríamos pensar que si llevase sus triples hacia las esquinas, conseguiría un mejor porcentaje, pero no es así. De hecho, su porcentaje es más bajo en las esquinas.
La temporada pasada, James recibió asistencia sólo en el 46,7% de tiros de 3 puntos, este año, esa tasa es mucho más alta, al 62,1%. Además, la cqmpaña anterior lanzaba triples más complicados y mejor defendidos que en la actual campaña. Este año, lanza menos triples cerca del final de posesión y suele tirar cuando la defensa no es muy agresiva. Es decir, el porcentaje debería haber mejorado.
En otras palabras, cada estadística nos indica que James debería estar tirando mejor de tres que en las temporadas anteriores. Es desconcertante, no tiene una explicación lógica. Una recesión en el tiro de este estilo es poco probable y más en una estrella del calibre de LeBron James. Con todos nuestros datos y la tecnología actual, se supone que deberíamos ser capaces de diseccionar y diagnosticar casos como este, sin embargo, sigue siendo complicado. James dice que se siente, incluso significativamente mejor que la temporada pasada, simplemente apunta que los tiros no le están entrando.
«Me importa poco mi acierto desde el perímetro«, dijo cuando se le preguntó sobre su pésimo tiro de 3 puntos a principios de este mes. «No es mi juego… Como os digo, al final de mi carrera no van a decir que LeBron era un gran tirador de 3 puntos. Voy a continuar tirando. Yo trabajo en ellos. Si entran, bien, si no, me jugaré todo en la pintura. Así que no soy un tirador de 3 puntos, nunca voy a ser un triplista. Si yo tiro bien, perfecto, pero los triples nunca definirán mi estilo de juego«, finalizó la estrella de los Cavs.
Entren los triples de James o no, este está haciendo una gran trabajo con su equipo, ya que Cleveland ocupa el cuarto lugar en el rating ofensivo de la liga, y LeBron está manteniendo el tercer mejor +/- de la NBA. Todo esto sugiere que los Cavs podrían ser capaces de capturar otra corona de la Conferencia del Este, incluso si James no recupera milagrosamente su acierto desde el exterior. Pero por lo que los datos estadísticos dictan, el colapso de tiro de James es inexplicable, digno de los libros de historia. Incluso en la era moderna, en la que se mide hasta el más mínimo dato, a veces tenemos que conformarnos con pensar que es una mala racha.