La enfermería de los New Orleans no ha parado de crecer este año. Bueno, y también en años anteriores, pero este año más. Incluso se lesionan los jugadores que vienen a cubrir lesiones.
De hecho, a los Pelicans no se le ha dado nada mal fichar parches, véase el caso de Bryce Dejean-Jones o de Ish Smith, por ejemplo. Y la verdad es que se nota.
Tim Frazier es el último invitado a jugar en el Smothie King Center. El base ha firmado un contrato de 10 días que parece que ya empieza a amortizar.
Ayer, en el partido que enfrentaba a los Pelicans ante los Kings, el jugador comenzó a dar destellos de calidad. Acabó el partido con 14 puntos (6-10 en tiros de campo, 2-2 en tiros libres), 9 asistencias (incluido un pase de fantasía increíble a Cunningham), 3 rebotes, 1 robo y ninguna pérdida. Nada mal.
Sin ser elegido en el draft del 2014, Tim ha estado jugando en los Portland Trail-Blazers y en los Philadelphia 76ers, y tan solo ha jugado 11 partidos en la NBA, promediando 5,2 puntos y 5,7 asistencias (5,7 puntos y 7,2 asistencias en Philadelphia, nada mal). A parte, también ha sido MVP de la D-League.
Es verdad que es muy pronto para sacar conclusiones, pero tiene más partidos para demostrar si vale. Y quien sabe si estamos ante un buen jugador que, quien sabe si puede formar parte de este proyecto durante unos años.