El National Collegiate Basketball Hall of Fame ha anunciado la promoción que pasará a formar parte de este grupo a partir de este 2016. Entre los nuevos integrantes destaca el nombre de Dominique Wilkins, quien fue estrella de la Universidad de Georgia antes de defender la camiseta de los Hawks durante la década de los ochenta y principios de los noventa. Wilkins, tras ser nombrado mejor jugador de la SEC (Southeastern Conference) en 1981, fue seleccionado en la tercera posición del Draft del siguiente año.
Doug Collins también pasará a formar parte del Hall of Fame después de tres magníficas temporadas con la camiseta de Illinois State. Acabaría su carrera universitaria con 2240 puntos, a lo que le seguiría su llegada a la NBA, en la que sería cuatro veces All-Star. Una vez retirado siguió viviendo en el mundo del baloncesto, pero desde los banquillos de Wizards y Bulls.
Siendo dos veces All-American con la Universidad de DePaul, Mark Aguirre lideró a su equipo a la Final Four en 1979, con un promedio de 24 puntos por partido. Además, al año siguiente fue elegido mejor jugador de la temporada.
Otro dos veces All-American fue Bob Boozer, quién se encargó de llevar a los Wildcats de Kansas State a la Final Four de 1958, logrando una anotación de 25,2 puntos por encuentro. Será incluido de manera póstuma tras su fallecimiento en 2012.
«L-Train«, así era apodado el jugador Lionel Simmons, quién a día de hoy es el único jugador en la historia de la NCAA que ha conseguido al menos 3000 puntos y 1000 rebotes a lo largo de su carrera universitaria, ya que tiene en su haber 3217 puntos, la tercera mejor anotación de la historia, tras las conseguidas por Pete Maravich y Freeman Williams. Llevó a su equipo tres veces a la March Madness y fue seleccionado mejor jugador universitario en 1990, antes de dar el salto a la NBA.
Jamaal Wilkes fue parte del poderoso equipo de UCLA dirigido por John Wooden, que logró dos veces el campeonato durante su estancia universitaria. Con él en el equipo, los de UCLA lograron una racha de 88 victorias consecutivas, una de las mayores hazañas de la historia del baloncesto. Desembarcó en la NBA en 1975, campaña en la que lograría ser Rookie del Año. Durante su carrera logró cuatro anillos con Lakers y Warriors.
En relación a los entrenadores, Hugh Durham dirigió dos equipos: Florida State en 1972 y Georgia en 1983; y se retiró de las pistas con 633 victorias. Por último, Mike Montgomery logró 282 victorias con Stanford y California y consiguió que los dos equipos fuesen serios candidatos al título durante la March Madness. Llevó a Stanford al puesto doce de la clasificación para el torneo de la NCAA y a una Final Four en 1998. A su otro equipo, California, lo guió hacia su primer campeonato de la PAC-12 en cincuenta años. Fue elegido cuatro veces mejor entrenador de la PAC-12 (Pacific Conference) y una vez mejor entrenador de la NCAA, en el año 2000. A lo largo de su carrera logró un total de 677 victorias. Sin embargo, su etapa en la NBA al frente de los Warriors no fue tan exitosa.