Precisamente hace unos días se hablaba de los buenos partidos consecutivos que había vivido Deron Williams contra los Trail-Blazers; pues bien, al menos de cara a los encuentros contra los Sacramento Kings y contra los Denver Nuggets no veremos ningún tipo de exhibición del base. Y es que D-Will sufrió una lesión en su abdomen y Rick Carlisle y su equipo han decidido que es mejor para el jugador regresar a Dallas para que le realicen pruebas. Esta baja, unida a la de larga duración de Parsons, es un duro golpe para los Mavs de cara a dos partidos consecutivos vitales para mantener sus opciones de PlayOffs contra equipos peor clasificados: Sacramento Kings y Denver Nuggets.
A falta del base titular, es probable que Rick Carlisle vuelva a poner al puertoriqueño J.J. Barea en el quinteto inicial, apoyándose en Raymond Felton y en Devin Harris, que volverá a vestirse de corto después de perderse el último partido por un motivo más que justificado y feliz; el nacimiento de su hija Violett. Ganar o ganar, volver al 50% en el récord y subir el nivel de juego de cara a un final de temporada que se muestra apasionante y decisivo: demasiadas cosas para no poder contar ni con Deron Williams ni con Chandler Parsons.