Tras la nefasta temporada que se está marcando la franquicia neoyorquina, que podríamos calificar de transición entre unos Nets derrochadores (y su final) y unos Nets más previsores, constructores de una franquicia a largo plazo. La plana mayor de la misma ha decidido dejar descansar a los dos mejores jugadores del conjunto, Thaddeus Young y Brook Lopez, por el resto de la temporada.
Es cierto que no restan muchos partidos de la presente campaña, solamente 6, y también lo es que los Nets no van a acceder a Playoffs, tras conseguir la pobre cifra de 21 victorias hasta ahora, y probablemente hayan decidido que es totalmente inútil pelear en este último tramo por ganarse el «honor» de los aficionados y es mejor dejar descansar a sus dos estandartes. La temporada de los Nets está siendo la peor en Brooklyn desde la famosa «mudanza», y el equipo ha tenido tramos que han recordado incluso a la desastrosa temporada 2009-10 (donde todavía se ubicaban en New Jersey), cuando la franquicia solamente consiguió 12 victorias, por 70 derrotas.
Podemos afirmar que la reconstrucción de los de Nueva York comienza ahora, resguardando el núcleo de la franquicia hasta el verano, donde se podrá vislumbrar el que realmente será el futuro de la organización, concordando con los movimientos realizados en la agencia libre. El récord de los Nets actualmente es el cuarto peor de la liga, estando por delante de equipos como Philadelphia 76ers, los Angeles Lakers y los Phoenix Suns, y dejando a merced de los Celtics un aumento de posibilidades de llevarse el pick número 1 del próximo Draft.
Contra los Pelicans comienzarán las vacaciones de Brook Lopez y Thaddeus Young, que han jugado una gran campaña cada uno para los Nets, que, por desgracia, no se ha traducido en victorias porque ambos jugadores han estado muy solos en cuanto a aportación. Los registros de ambos jugadores han sido buenos. Brook ha promediado 20.6 puntos, 7.8 rebotes y 1.7 tapones en toda la temporada, todo ello jugando una media de 33.7 minutos por encuentro. Thaddeus Young va a finalizar la que ha sido, por juego (no por anotación), la mejor temporada de su carrera. A unos nada despreciables 15.1 puntos por partido añade 9 rebotes por noche, mejorando increíblemente el registro del año pasado en este apartado, que era de 5.4 la pasada campaña, aportando incluso 1.5 robos a la causa, todo esto en 33 minutos por partido.
Por último, cabe destacar que tanto Brook Lopez como Thaddeus Young no se han perdido esta temporada ningún partido por lesión, cosa que sí ocurrió en otras temporadas. Ha sido una de las más saludables campañas de la carrera de ambos interiores. También la organización decidirá qué jugadores pueden continuar en el equipo en estos partidos por medio del rendimiento que dichos componentes de la plantilla dejen patente en los próximos encuentros.