Media Europa suspira por Anthony Randolph

Un pívot que se mueve como un alero. Esa podría ser la definición de Anthony Randolph, la gran estrella del Lokomotiv Kuban de Krasnodar, la auténtica revelación de la Euroliga, un equipo que ayer hizo saltar las alarmas del Palau, forzando el quinto partido de su serie ante el FC Barcelona Lassa y dejándolo todo abierto para el martes, donde el Basket-Hall será una caldera y empujará como nunca a Barztokas y a los suyos en busca de su primera presencia en una Final Four, en la que es su segunda participación en la máxima competición del baloncesto europeo.

Pero si hay un hombre que se lleva todas o gran parte de las miradas en este Lokomotiv ese es Anthony Randolph, nacido en Würzburg, Alemania, el mismo pueblo que Dirk Nowitzki, pero con pasaporte estadounidense, llegó este verano a Krasnodar, procedente de la NBA, donde promedio 7.1 y 4.3 rebotes en 15.2 minutos en los 252 partidos que disputó, firmando un contrato de dos años con los rusos.

A sus 26 años, este pívot elegido en el puesto 14 del Draft de 2008, está llamando con su juego a las puertas de los grandes equipo de Europa, y según cuenta David Pick, tanto Fenerbahçe como CSKA andan tras sus pasos, además del Efes Pilsen, el Khimki y el Darussafaka Dogus, por lo que su continuidad en Krasnodar está en entredicho pese a tener un año más de contrato.

Seguramente sean más los que se sumen a la puja, pues los nombres de Real Madrid y FC Barcelona Lassa ya han sonado, con menor fuerza, para hacerse con un jugador que está promediando 19.5 puntos, 7.3 rebotes, 1.3 tapones y 22 de valoración en estos cuartos de final de la Euroliga y que ayer fulminó al barça con 28, 10 de ellos en la prórroga.