
Courtney Lee acaba su contrato en el próximo mes, y se convertirá en agente libre, pero el escolta tiene claro donde quiere jugar las próximas temporadas: en Charlotte Hornets.
«Por supuesto que me gustaría volver a Charlotte. Tuve la oportunidad de crear una gran química y amistad con mis compañeros desde el momento en que llegué, y ha sido muy divertido jugar con ellos. Jugamos todos juntos, no hay egos en este equipo. Todo lo que hacemos es buscar la mejor jugada para ayudar a ganar el partido, y esa es la clase de compañeros de equipo con los que quiero estar».
Toda esa química de la que habla Lee la ha labrado en algo más de dos meses de competición, ya que no olvidemos que el escolta llegó a Charlotte desde los Memphis Grizzlies en este pasado febrero, en un traspaso a tres bandas antes de la hora límite de traspasos. A sus 30 años, Lee ha jugado 28 partidos con los Hornets, con los que ha promediado 8.9 puntos, 3.1 rebotes y 2.1 asistencias, tirando cerca del 45% en tiros de campo y cerca del 40% en triples, pero sobre todo ha sido una pieza clave en la defensa del equipo, algo que el equipo necesitaba cubrir con urgencia tras la lesión de Michael Kidd-Gilchrist.
Posible cambio de rol de Courtney Lee
El futuro de Lee en el equipo, si es que consigue su deseo de continuar en la franquicia de Michael Jordan, dependerá mucho también del estado físico de Kidd-Gilchrist y de si Nicolas Batum decide renovar con los Hornets, ya que, a priori, estos dos últimos serían los jugadores que ocupasen las posiciones de escolta y alero titular, y Lee podría dejar la titularidad para ser un factor determinante del equipo de Charlotte desde su segunda unidad, aportando defensa y lanzamiento exterior desde el banquillo.