En la pasada noche, la selección de los Estados Unidos hizo un partido de preparación para los juegos olímpicos de Rio 2016 contra la selección de China, a la que ganaron cómodamente 106-57. Uno de los principales focos del pre-partido era cómo recibiría el público de Los Ángeles al alero de los Golden State Warriors Kevin Durant y no fue precisamente de una manera muy cariñosa.
Para ser más específicos, en el tip-off del partido, mientras el locutor iba diciendo uno a uno los nombres de los jugadores por megafonía, cuando tocó el turno de Kevin Durant, se oyeron abucheos hacia el mismo, que, según sus propias declaraciones, no escuchó. Habiendo mentido o no, Durant fue el mejor de todo el equipo, anotando unos notables 19 puntos.
«No escuché ningún abucheo. La afición estuvo estupenda por aquí y ojalá sea igual de buena en el Oracle Arena».
Es cierto que pueden sonar como un cliché las palabras de Kevin Durant, pero el jugador actúa inteligentemente no metiéndose en el lío de juzgar o no allá por donde lo vayan a abuchear y silbar durante este año. A pesar de todo, los escuchara o no, el alma máter de la universidad de Texas fue el mejor del equipo. El siguiente partido, será su primera prueba en el Oracle como jugador de los Warriors, pero en este caso lo hará jugando con el uniforme de la selección estadounidense, contra la selección china, nuevamente. A diferencia del Staples, el público de Oakland deberá rugir al escuchar el nombre de Kevin cuando éste sea nombrado por el locutor del Oracle.
Aunque si bien por parte del público parece no tener a todos contentos, en lo relacionado a sus compañeros de profesión, parecen no guardarle ningún tipo de rencor, como bien se pudo ver en las redes sociales; entre bromas, Draymond Green y Kyrie Irving aparecieron en un vídeo cuestionando la estatura real de Kevin Durant, el cual está medido en 6 pies y 9 pulgadas, aunque muchos dicen que realmente mide 7 pies.
Lo entiendo. Durant tiene derecho a tomar la decisión que ha tomado, pero también hay gente que tenemos derecho a opinar que su decisión es la de un deportista cobarde. Si yo hubiera tenido la suerte de estar en el Staples también le hubiera silbado, máxime cuando anteriormente criticó decisiones como esas cuando las tomaron otros jugadores.
Puede ganar algún o varios anillos con los Warriors, que ya ganaron sin él, pero ha perdido el respeto como deportista de mucha gente.
Con todo el respeto.
Chupito por cada abucheo o «COWARD» que se vaya a llevar este año y tenemos para parar un barco.