Aunque el pistoletazo de salida a la temporada se dará el 27 de septiembre, la mayoría de los jugadores de los Dallas Mavericks ya están en la ciudad texana entrenándose y realizando eventos juntos como el torneo de balón prisionero organizado por Deron Williams o en el torneo benéfico de tenis de Dirk Nowitzki. Todo esto no es una casualidad; los jugadores de los Dallas Mavericks quieren empezar a crearse una buena química de equipo para estar totalmente compenetrados desde el minuto 0 de RS.
Con caras nuevas como Barnes, Bogut, Curry o Hammons, los Mavs tienen un duro trabajo por delante si quieren realizar un buen juego en equipo y ser competitivos. Tener una buena química —como poco una química profesional— es necesario para cualquier equipo que quiera ganar el anillo. Este aspecto lo saben muy bien los 4 ganadores de la NBA con los que cuentan en Dallas: Dirk Nowitzki y J.J. Barea con los Mavs y los fichajes Harrison Barnes y Andrew Bogut con los Golden State Warriors.
De hecho, fue el propio Harrison Barnes el que, en declaraciones a Mavs.com, habló de la importancia de tener confianza los unos con los otros en un mismo roster:
«Hay que tomarse su tiempo para conocer bien a los compañeros y construir esa confianza y crear esa competición diaria. Esto es lo que nos va a permitir tener éxito.»
El alero también habló del estilo que debería tener el equipo para conseguir ir sumando victorias. Destacó que serán «un equipo trabajador» consciente de no ser un conjunto con un talento ofensivo inmenso y que deberán apoyarse también en la defensa para cumplir los objetivos.