El FC Barcelona Lassa se impuso al campeón de Alemania, el Brose Bamberg, por 78-74 en el partido válido para la cuarta jornada de la nueva Euroliga disputado el viernes en el Palau Blaugrana. Los hombres de Georgios Bartzokas así respiran, tras la derrota remediada dos días antes en la cancha del Estrella Roja y la lesión que les dejará sin los servicios de Pau Ribas para el resto de la temporada.
“Estoy muy contento por la victoria, que para nosotros era vital,” – dijo el técnico del Barça tras el encuentro – “y sobre todo estoy contento porque no hemos perdido a más jugadores en el camino…”.
Amargura, en cambio, por parte alemana, ya que el Brose coleccionó su tercera derrota en cuatro partidos, y las tres llegaron en la última posesión, cuando el Bamberg parecía estar cerca de poder culminar con éxito los encuentros. La nueva Euroliga no da tregua, y tres derrotas pesan como piedras en una competición que apenas deja margen de error con el nuevo formato.
“Es una pena, una vez más nos dejamos escapar un partido que estaba a nuestro alcance. Ellos jugaron mejor en la pintura, pero nosotros estábamos respondiendo muy bien desde la larga distancia, pero en el momento decisivo fallamos tres triples consecutivos y no hubo manera. Estamos muy cerca de poder competir con los más grandes de Europa, pero es evidente que aún nos falta algo”.
Los dos entrenadores parecían agotados y el partido visto en el Palau fue agonísticamente muy intenso, como si fuera un partido decisivo, de estos que se juegan a finales de temporada, cuando se disputan los títulos… es que la nueva Euroliga no deja descanso y esta semana con doble jornada pasó factura. Tanto el coach italiano del Bamberg como el griego del Barça, de hecho, se dejaron escapar alguna sincera crítica hacia el nuevo sistema de competición, que no les deja tiempo para recuperarse ni física ni mentalmente.
“Lo que está pasando en esta Euroliga es increíble” – declaró Andrea Trinchieri – “cada jornada dos o tres jugadores importantes de algún equipo se lesionan, caen como moscas; posiblemente no estamos preparados. Cada partido es una batalla, lo tenemos que dar todo en la cancha, y luego el fin de semana tenemos nuestras ligas, cada uno con su dificultad… Esta competición es nueva para todos, supongo que todos los equipos estén experimentando los mismos problemas”.
El Brose Bamberg domina indiscutiblemente en el panorama de la Bundesliga, pero Trinchieri no quiere ni oír hablar de que el campeonato alemán no es competitivo como otras ligas europeas:
“No van por ahí los tiros, cada fin de semana es una agonía, por ejemplo ahora mi mayor preocupación es cómo encontrar a cinco jugadores hábiles para el domingo, y aquí en España es igual… por ejemplo nadie se esperaba que el Bilbao pudiese ganarle al Barça, pero así fue. Tenemos encima un cansancio físico y mental como si estuviéramos en mayo, pero solo estamos a finales de octubre”.
Georgios Bartzokas corroboró las palabras del entrenador rival:
“Respeto mucho al señor Bartomeu y entiendo que este nuevo formato de competición es muy atractivo para los aficionados y las televisiones, pero creo que esto es demasiado para Europa. Jugamos tan a menudo casi como en la NBA, pero sin las condiciones de la NBA. Porque en la NBA, si pierdes un partido a estas alturas, no pasa nada, hay 82 partidos de temporada regular y todo el tiempo y las ocasiones para recuperar. En esta Euroliga, en cambio, si pierdes es un funeral. No tenemos tiempo para entrenar, que es lo que ayuda a los equipos a mejorar. Entre jugar y los viajes… no hay tiempo para recobrar fuerzas”.
Los dos entrenadores estuvieron intercambiando opiniones antes del encuentro, tal y como comentó el mismo Bartzokas:
“Lo estaba hablando con Trinchieri antes del partido, y convenimos que, para poder jugar a estos ritmos, deberíamos de tener plantillas de 15 jugadores, justo como pasa en ultramar. Porque realmente es muy complicado hacer frente a todos estos empeños”.
Palabras interesantes que llegan tras cuatro de las 30 jornadas que prevé la competición… Y que nos hacen reflexionar un poco acerca del baloncesto europeo y su afán para intentar parecerse a la NBA.