Ha costado lo suyo, casi un par de meses, pero por fin Josh Richardson ha recibido las noticias que esperaba ansiosamente. Los médicos de Miami Heat le han dado hoy el alta médica y el combo-guard podría estar disponible para Erik Spoelstra hoy mismo contra los Toronto Raptors. Eso sí, Richardson no ha realizado training camp y apenas ha participado en un par de entrenamientos con contacto, por lo que deberá realizar su particular pretemporada y el proceso de adaptación no va a ser inmediato, sino que va a durar seguramente unas semanas. Sin embargo, la noticia es suficiente; vuelve a estar disponible y eso es lo más importante.
Eso le da a Coach Spo todavía más versatilidad en el backcourt, puesto que en él ya cuenta con Dragic, Waiters y Tyler Johnson, además del rookie Rodney McGruder y el aún lesionado Wayne Ellington. La introducción de Josh Richardson es un refuerzo más en el perímetro, otro defensor férreo con buen lanzamiento exterior que añadirá más peligro y profundidad a la zona exterior.
El rol que va a tener a lo largo de la temporada dependerá seguramente de su adaptación. Tendrá minutos en la rotación casi al 100%, seguramente en detrimento de McGruder, ya que se trata de un jugador que cuenta con la plena confianza de Spoelstra y el staff técnico y ya demostró mucho en los pasados PlayOffs. Lo que se desconoce es si terminará quitándole el puesto de titular a Waiters o si, por el contrario, ejercerá de revulsivo para la segunda unidad al estilo Tyler Johnson. La calidad en la plantilla no es suprema, pero la competencia en casi todos los puestos da un plus a la franquicia de South Beach y todos pueden aportar mucho en la pista; Josh Richardson incrementará todavía más esa sana competitividad.