
Este es el problema de la actual situación de los New York Knicks. Un equipo que se ha reforzado mucho este último verano y que se ha encontrado con un problema con el que no esperaban, la defensa. Estos problemas defensivos sorprenden aun más precisamente porque sus jugadores no tenían precisamente fama de malos defensores. Son el caso, principalmente de dos de las incorporaciones, Courtney Lee y Joakim Noah.
En el caso del ex de Charlotte Hornets, siempre se ha caracterizado por ser un jugador completo en todos los aspectos, tanto ofensivamente como defensivamente. Y que vamos a decir de Joakim Noah, un jugador que en la temporada 2013-2014 fue nombrado como el mejor defensor de la liga, además de estar nominado en el mejor quinteto defensivo del año en tres ocasiones, dos de ellas en el primer equipo.
El problema de los Knicks la defensa en conjunto. Durante los primeros partidos de la temporada el equipo ha transmitido demasiada fragilidad atrás. No muestran una solidez defensiva y en muchos tramos de partido las rotaciones hacen que el equipo se desconecte bajando la concentración.
A día de hoy los Knicks encajan 108,8 puntos por partido, convirtiéndose en el cuarto peor equipo en este aspecto. Viendo más a fondo estos datos, en las derrotas el equipo concede 113,2 puntos mientras que en las victorias 101,3. En una liga tan competitiva como la NBA es muy complicado ganar partidos si tu defensa encaja por encima de los 100 puntos por partido.
Los Knicks tampoco han conseguido hacer del Madison Square Garden un fortín del que resulte difícil sacar partidos. No aprovechan el impulso que da jugar en casa. Jugando como local también superan los más de 100 puntos encajados, tanto en los partidos que acaban en victoria como los que no.
Otro de los problemas que se ha ido manifestando en las últimas semanas es el de los rebotes. Los Knicks están teniendo muchos problemas a la hora de cerrar el rebote. Esto se ve reflejado en que el equipo es el séptimo peor equipo de la liga en esta estadística. Capturan 43,3 rebotes por partido, un pobre bagaje si tenemos en cuenta que el juego interior titular de los Knicks lo forman Porzingis (2,21cm de altura), Joakim Noah, un jugador que promedia más de 10 rebotes por partido en su carrera y exteriores como Carmelo Anthony que ayudan mucho en el rebote. Un Carmelo que ha incrementado su estadística en el rebote notablemente en las últimas temporadas.
La fragilidad defensiva de los de Hornacek se ve reflejada en prácticamente todas las estadísticas. Si nos detenemos a observar los porcentajes de tiro de los equipos rivales frente a los Knicks se puede llegar a entender el porqué de estos problemas.
¿Cómo un equipo que se sitúa el séptimo en porcentajes de tiro de campo (46,2 %) y el decimotercero en triples (35,4 %) puede llevar un balance tan negativo en cuanto a victorias?
Si, los Knicks ofensivamente registran unos porcentajes notables pero como decíamos al principio, en la NBA la defensa se antoja incluso más importante que el propio ataque.
La franquicia de Nueva York son el decimosexto equipo en cuanto a porcentaje concedido en el tiro de dos. Consiguen dejar al oponente con un 45%, algo que no parece un problema demasiado grande. Donde verdaderamente los Knicks tienen un ‘agujero’ es en la defensa de perímetro. Son el segundo peor equipo en porcentaje concedido en triples. Los rivales lanzan con un 37,6 % en el tiro de tres, y encajan más de 10 triples por partido.
La fragilidad defensiva de este equipo no favorece el estilo de juego de sus exteriores. Jugadores como Derrick Rose, Brandon Jennings o Courtney Lee pueden explotar más sus cualidades si el equipo tuviese más opciones de salir jugando rápido. ¿El problema? Que todo buen ataque comienza con una gran defensa.
La temporada en la que Derrick Rose fue MVP su equipo se caracterizaba precisamente por la defensa. Los Bulls de la temporada 2010-2011 fueron el segundo mejor equipo tanto en puntos concedidos, les anotaban únicamente 91,3 puntos por partido, como en rebotes capturados (44,2). Los rivales solo les anotaban poco más de 5 triples por encuentro con un pobre 32,6 % desde la línea exterior. En este equipo el estilo de juego de Derrick Rose se veía beneficiado. Su explosividad y velocidad eran aun más imparables en transiciones rápidas en las que al equipo rival no le daba tiempo a situarse defensivamente.
Un caso parecido es el de Brandon Jennings, un base con un estilo de juego parecido al de Rose. El californiano es más peligroso cuando el ritmo de partido es alto, cuando el juego se vuelve alocado.
La franquicia de los Knicks es consciente del problema que tiene el equipo y no han tardado en reaccionar. Tras la derrota frente a los Jazz esta última semana, en el que concedieron 65 puntos en la segunda parte, la franquicia comunicó el nombramiento de Kurt Rambis como el asistente defensivo de Hornacek.
El equipo tiene mucho margen de mejora y los jugadores apropiados para hacerlo. Primero intentar recuperar la mejor versión de Joakim Noah, un jugador que se antoja imprescindible en el sistema defensivo del equipo. El resto dependerá del trabajo que se realice con el equipo y de cómo se realice. Los Knicks tienen jugadores más que capacitados para poder defender a alto nivel, solo se trata de engrasar la maquinaria y ponerla a funcionar.
es mejor defender con 5 que con 4.
¿A que te refieres?