Cortar a Nick Young. Esa era una de las cosas más claras que había en el equipo angelino cuando la temporada 2015-2016 de Lakers acababa un 13 de Abril. Swaggy P no daba pie con bola. No estaba centrado en su juego y, para colmo, D’Angelo Russell sacó a la luz un vídeo en el que mantenía una relación a espaldas de su ya ex-pareja Iggy Azalea.
Dejando un poco de lado el ‘Sálvame de Los Ángeles’, Nick ya era casi un ex jugador. Centrado en pasárselo bien, salir de fiesta y acostarse a las tantas en lugar de entrenar y salir a la cancha fresco a ganar partidos. De ahí, empezaron a surgir rumores que, según dice ahora Young, le humillaban:
«Por supuesto que esos rumores me humillaban. Me dije a mí mismo que no iba a escuchar más rumores porque iba a salir a la cancha a jugar con el corazón. Solo salir y tirarme a por cada balón», dijo. «Si tengo que ser Denis Rodman, lo seré«, añadió Nick Young.
Al parecer, el dorsal número 0 de Lakers se tomó muy en serio su cambio de actitud y empezó a trabajar duro.. Algo que tenía muy verde era la defensa, así que se empeñó en mostrar a su actual entrenador Luke Walton el gran cambio que había dado y éste no dudó en dar un voto de confianza al californiano.
Ahora, Nick Young es una pieza clave en estos jóvenes Lakers, promediando 14.7 puntos por partido en estos primeros 10 partidos y sorprendentemente no saliendo del banquillo, que era la posición que ocupó en los años que estuvo en Lakers dando recitales ante el mismísimo LeBron James, sino estando en el quinteto titular junto con D’Angelo Russell, Luol Deng, Julius Randle y Timofey Mozgov.