Tim Frazier no permite remontar el vuelo a los Hawks

New Orleans Pelicans 112-94 Atlanta Hawks
Dennis Schröder volvió a recuperar su nivel tras dos malos partidos, pero fue insuficiente. | Nil Alemany (CC)

Tras dos duras derrotas fuera de casa ante Charlotte Hornets y New York Knicks y en víspera de acometer 5 partidos fuera de casa, la franquicia de  Georgia llegaba con necesidad de conseguir la victoria, pero unos revitalizados Pelicans, liderados por Tim Frazier, se encargaron de aguar la fiesta.

Desde el comienzo del partido se pudo observar una mayor intensidad en los visitantes, quienes a partir de un 8-9 para Atlanta se pusieron por delante en el marcador, posición que ya nunca perderían. Pero no todo fue un camino de rosas para los Pelicans, ya que a 3 minutos para la conclusión del primer cuarto, y con New Orleans dominando a Atlanta 26-12 en el marcador, Anthony Davis se vio obligado a retirarse a vestuarios al golpearse contra la grada cuando intentaba salvar un balón, y no reaparecería hasta bien entrado el último cuarto. Lejos de afectar al espíritu de los compañeros de Davis, esta lesión alentó a los de Gentry, que cerraron el primer cuarto con 20 puntos de ventaja (34-14). 

Ya en el segundo cuarto un acertado Terrence Jones lideró la ofensiva para colocar a Pelicans 30 arriba (49-19), y aunque los Hawks consiguieron ponerse a 16 puntos cuando restaban 2 minutos para el descanso con un Thabo Sefolosha empeñado en aferrarse al partido, un parcial de 6-0 de los visitantes les situaba en el descanso con 22 puntos de ventaja.

En la segunda parte, no contentos con el resultado, los Pelicans llegaron a tener una ventaja de 35 puntos (87-52) a mitad del tercer cuarto, pero finalmente Atlanta consiguió reducir esa ventaja para llegar al inicio del último cuarto con una desventaja de 24 puntos (95-71). En el último cuarto Budenholzer y los jugadores, arengados por el estadio, hicieron un último intento de remontada, llegando a situarse a «solo» 18 puntos (97-79), pero la vuelta de Anthony Davis a pista acabó con toda aspiración de victoria de los locales. Finalmente, en los últimos minutos de encuentro pudimos ver a gente menos habitual en Atlanta como Deandre Bembry o Ryan Kelly, y los Pelicans también pudieron dar minutos al reciente fichaje Anthony Brown.

Destacable el partido de Tim Frazier, quien en 35 minutos de juego sumó 21 puntos, 5 rebotes, 14 asistencias y 3 robos de balón, con un 58% en TC (7/12) y un 75% en T3 (3/4), en el que ha sido sin duda su mejor partido como profesional. 

Así las cosas, Atlanta sigue dentro de los 3 primeros puestos de la Conferencia Este, con un balance de 9-5, mientras que los Pelicans comienzan a salir de las últimas posiciones en la Conferencia Oeste con las 3 victorias consecutivas que han logrado, pero aun así se encuentran con un balance de 5-10.

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