A veces, las mejores cosas llegan sin hacer ruido y tardas tiempo en darte cuenta de lo que tienes. Allá por los primeros compases del 2015, los Boston Celtics finalizaron uno de los numerosos traspasos que cambiaron por enésima vez el roster de un equipo en constante transformación. Danny Ainge movió sus hilos para intentar sacar a la franquicia del trébol de la mediocridad y de ahí consiguió un timo digno de Paul Newman y Robert Redford a unos Phoenix Suns que entregaron a Isaiah Thomas sin saber que se estaban desprendiendo de un futuro All-Star. La contratación de «The Little Guy» fue la más destacada, pero hay alguien que sin despertar pasiones ha conseguido la difícil tarea de seguir en los cambiantes Celtics desde ese momento, y no es otro que Jonas Jerebko.
El jugador sueco llegó a Massachusetts junto al queridísimo Gigi Datome, que no corrió la misma suerte, a cambio de un Tayshaun Prince prácticamente inédito con la elástica verde. Un traspaso a priori sin mayor importancia con los Detroit Pistons, pero que a Brad Stevens le ha venido como anillo al dedo. El técnico del equipo de Boston ha encontrado en Jerebko una herramienta más que útil para cubrir los diferentes huecos en su esquema, sobretodo en defensa, y a día de hoy es un fijo en la rotación. Desde que explotara de una forma sorprendente en los Playoffs de la temporada pasada ante los Hawks, el cariñosamente apodado como el Larry Bird sueco ha sido casi indispensable, y eso que el inicio de curso no ha sido precisamente florido.
Con las importantes bajas en un plantel no sobrado de calidad, el ex de los Pistons no consiguió dar el paso adelante necesario. Las ausencias de Crowder y Horford requerían a un Jerebko más activo que nunca, pero desafortunadamente cuando más lo esperábamos no apareció. El sueco fue uno de los focos de crítica hacia un equipo perdido y que, por resumir, no jugaba a nada, no defendía a nadie, y desconocía el significado de la palabra rebote. Afortunadamente los tiempos cambian, y ahora el receptor de ira de todo aficionado Celtic se llama Amir Johnson. Irónicamente, con la vuelta de los lesionados también tenemos de nuevo a ese Jerebko que todos echábamos de menos.
El Larry Bird sueco ha vuelto por los fueros que le hicieron ganarse un puesto en Boston la temporada pasada, y en las últimas fechas es de nuevo ese jugador tan importante en ambos lados de la cancha. Las sensaciones en pista han sido más que positivas, pero es que además los datos acompañan y son bastante impresionantes. Jerebko ha convertido 17 de sus últimos 20 tiros de campo (8/9 en triples) siendo clave en partidos como en su antiguo hogar en Detroit o la remontada en Minnesota, y sus porcentajes de acierto en la temporada le colocan entre la clase alta de la liga. Tras 17 encuentros, el sueco presume de un 49.3% de efectividad en tiros de campo y un 44.4% en triples, y todo ello con apenas cinco lanzamientos por partido; casi nada.
Su gran desempeño en la parcela ofensiva no ha sido la única buena noticia en los últimos días para el ex de los Pistons. Jerebko ha vuelto a ser de nuevo el pegamento desde el banquillo para los apartados de defensa y rebote, y para ello tiene un socio de lujo. Junto al sueco, Marcus Smart ha sido clave en dichos aspectos y con ello han llegado los buenos resultados que a principio de curso se escapaban. Con la mejoría del jugador nórdico también ha llegado el crecimiento de una segunda unidad que no pasaba por su mejor momento hace tan solo unos días pero que en los recientes triunfos ha tenido un papel destacado.
Contando con una media de aproximadamente 18 minutos en cancha, Jonas Jerebko está aprovechando de nuevo a lo grande las oportunidades que Brad Stevens le sigue dando partido a partido. El entrenador natural de Indiana sabe que el Larry Bird sueco es una pieza que ya quisieran muchos equipos porque, como se suele decir, sirve tanto para un roto como para un descosido. La baraja de Boston cuenta con un comodín que se muestra cada vez más, y si éste se reparte los Celtics van a ganar bastantes partidas.
Uno de los hombres más versátiles de estos Celtics, el año pasado dió la cara mientras Sullinger nos hundía en Playoffs. Sabe jugar, puede defender del 1 al 4, Baja rebotes, juega fuerte y verlo lanzar sin marca es saber que la bola va a entrar, Ha desarrollado muy bien la penetración con contacto. Actualmente debe ser uno de los jugadores más productivos de la NBA. Si fuese un poco más fuerte ya le hubiese quitado el puesto a Amir.
Un poco decepcionante su comienzo,pero era de esperar su mejora,un jugador con unas condiciones buenas para el ataque y tambien en defensa,imprescindible para potenciar la segunda unidad,bueno,ya esta aqui y esperemos que no se marche,por contra el que si se ha ido es Amir,y parece que puede tener una temporada irregular,me da que sus problemas fisicos no le dejan desarrollar su juego.
Yo fui de los que le criticaron, pero el sueco me ha ido tapando la boca primero con actitud y después con rendimiento.
lástima que en el último partido, Detroit en casa, no pudiera refrendarse más. Su estadística no es mala pero si miramos la de los ala pivots contrarios…
Sabemos que va a meter unos tiros de vez en cuando pero es en defensa y rebote donde debe hacerse valioso, podría mejorar su status viendo cómo está la competencia que tiene.