El partidazo de Kyle O’Quinn ante los Minnesota Timberwolves el pasado jueves no ha pasado desapercibido en la gran manzana. Si bien es cierto que sufrió mucho a Karl-Anthony Towns en su primer choque el martes, consiguió frenarle en la «vuelta» en el MSG. Además, está siendo uno de los grandes intimidadores de la zona de los Knicks. Especialmente, los partidos en los que Joakim Noah no ha estado por lesión y él ha tenido que dar un paso adelante. Así habló Carmelo Anthony de su actuación:
«Ayuda tener otra voz como esa ahí fuera, especialmente un ‘grande’. Los últimos partidos, ha dado un paso al frente en un momento importante. Sin Jo(akim Noah), está encajando en sus zapatos».
Kyle O’Quinn se quita importancia.
Como venimos diciendo, está jugando muy bien. También es cierto que Jeff Hornacek está siendo inteligente en cuanto al uso de sus hombres interiores. Más allá de la lesión o no, ha sabido sentar a Noah cuando el equipo lo ha necesitado. A su vez, lo ha suplido con Porzingis o con Willy si el equipo no ha necesitado a Kyle. Aún así, cada vez que sale lo da todo. Y, luego, le deja las decisiones al entrenador. Con todo el tema de Noah y su nivel actual, a la prensa le ha faltado tiempo para preguntar sobre na posible subida de rol.
«Eso no me importa. Lo que decida el entrenador, a mi me va bien. De titular. desde el banquillo… Mientras esté ahí. Lo que decida. ¿Qué podría discutir con él?»
«Joakim no se ha ido a ningún lado. Se ha sentado a mi lado, hablándome cada tiempo muerto como un entrenador. Estoy muy agradecido.»
Sin duda ya sabíamos del compromiso de Joakim Noah en el vestuario. Willy Hernangómez nos lo ha confirmado varias veces y ahora lo hace Kyle O’Quinn.