
Tyronn Lue ha confirmado este jueves en rueda de prensa lo que los aficionados de los Cleveland Cavaliers intuían: la plantilla necesita un base suplente.
Tras la marcha de Dellavedova a Milwaukee, Cleveland ha experimentado con varios bases de segunda línea sin éxito, obligando a jugadores como Irving o LeBron James a jugar fuera de posición en varios encuentros. Parece que el australiano cumplía una función en la sombra más importante de lo que la franquicia esperaba, y ahora han de apresurarse para adquirir un creador de juego en el mercado.
Durante parte de la temporada, Tyronn Lue ha hecho malabares para cuadrar su esquema, viéndose obligado a sacar a varios jugadores de su posición natural e incluso a incluir en la rotación a Jordan McRae. Pese a que no parece que haya dado malos resultados, puesto que el equipo marcha primero en la Conferencia Este con un récord de 16-5 y es el tercer mejor equipo de la NBA en cuanto a datos, Lue se ha cansado de tanto desequilibrio y le ha pedido a David Griffin, mánager general de los Cleveland Cavaliers, que ponga el ojo en un base de garantías y con experiencia para la segunda unidad.
«Cuando tengamos un base reserva, entonces podremos definir cómo va a ser nuestra rotación y no tendremos que cambiarla noche tras noche. Creemos que así nuestro juego podrá fluir mejor».
Con estas palabras, Tyronn Lue definía uno de los problemas que más afecta a la continuidad del actual campeón de la NBA. Y es que los de LeBron no quieren relajarse, como ya indicó el ’23’ tras las tres derrotas consecutivas, y están lanzados a por el que sería el segundo anillo de la franquicia y el cuarto de James. Habrá que esperar para saber cuál es la elección de los Cleveland Cavaliers y si esta da resultado.