No corren buenos tiempos para Miami Heat. Ya no es el equipo que ganaba campeonatos. Pero es incuestionable que el equipo actual juega con una intensidad y una profesionalidad admirables. Ayer, como en otras ocasiones en el Oracle Arena, jugaron un partido duro, tosco, a cara de perro. Plantaron batalla a unos Warriors que, si bien andan sobrados en cuanto a talento, les viene bien para ganar el anillo disputar partidos en los que se ven obligados a entrar en el cuerpo a cuerpo. Aunque los Warriors ganaron, 107-95, la victoria les costó sudar sangre y solo pudieron respirar cuando acabó el partido.
“Juegan con fuerza. Disputan cada posesión» coincidieron tanto Steve Kerr como Stephen Curry.
Miami nunca se relajó ni dio el partido por perdido, ni siquiera con una desventaja de 11 puntos al final del tercer cuarto, y recortaron la diferencia a tres hacia la mitad del último cuarto, poniendo a los de Steve Kerr en serios apuros. Los chicos de la Bahía no tuvieron un partido fácil y, a falta de Klay Thompson, que descansó, necesitaron que sus otras estrellas hicieran un buen partido. Curry, que vuelve a ser decisivo, rozó el triple doble: 24 puntos, 8 rebotes y 9 asistencias, Durant estuvo en sus números de la temporada con 28 puntos y 9 rebotes y el incombustible Green aportó 13 puntos, 9 rebotes y 5 asistencias.
«Sí, no perdimos balones, lo que nos permite como mínimo tirar a canasta, dijo Curry. Tuvimos muchas posesiones en las que sabíamos exactamente lo que queríamos hacer y lo hicimos. Ese es nuestro objetivo a lo largo de la temporada. Metemos o fallamos los tiros, vivimos con esto, pero no perder posesiones, mover bien el balón y no rendirnos fue fundamental para nosotros esta noche.»
Kevin Durant, máximo anotador del partido junto con Whiteside, que además capturó 20 rebotes, destacó el trabajo del equipo en el último cuarto y la mejora con respecto a partidos recientes.
«El entrenador nos alertó de alguna jugada y lo controlamos a la perfección. Conseguimos alguna bandeja y también algunos bloqueos. Sin duda, ha sido un partido diferente; no fue fácil pero supimos adaptarnos».
No se trataba de los temibles Heat de LeBron James, Dwyane Wade y Chris Bosh. No jugarán los playoffs pero los Warriors tuvieron que luchar contra un equipo que jugó con una gran intensidad. Hacerlo y superarlo les ha venido muy bien y será muy importante para los dubs en el futuro.
Partido importante, no por la victoria sino porque el equipo bajo el culo y se puso hacer las cosas bien, este es el camino.
Muy buen partido en cuanto a la defensa se refiere. Así también se gana.