Los Boston Celtics recibían a los Charlotte Hornets buscando su séptima victoria consecutiva como local. Los verdes venían de un ajustados triunfo frente a Atlanta, mientras que los visitantes, entraban al juego con una racha negativa de 5 juegos consecutivos bajo esa condición.
El comienzo del juego mostraba un fluido ataque por los pupilos de Brad Stevens. Con mucho movimiento de balón, generaban tiros fáciles, que la defensa de Charlotte simplemente no podía detener.
Ball movement on point 👌 pic.twitter.com/M5bjzVsdpG
— Boston Celtics (@celtics) 17 de enero de 2017
Pero conforme fueron avanzando los minutos, los visitantes fueron tomando confianza, y guiados por su base, Kemba Walker, lograron terminar los segundos 6 minutos con 21 puntos (los primeros 6 solo habían anotado 9) para cerrar el primer cuarto con un apretado 34-30 a favor de los Celtics.
En el segundo cuarto, con el ingreso de las bancas, se vieron varias facetas diferentes en el juego de ambos equipos. El ingreso de Kelly Olynyk y Jaylen Brown le dieron variantes en ataque y versatilidad a la defensiva verde, mientras en el costado ofensivo, Marcus Smart orquestaba con precisión.
In case anybody forgot… The bounce is real. pic.twitter.com/Rm09qZv0V2
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Como contrapartida, los dirigidos por Steve Clifford carecían de contundencia ofensiva, la banca apenas logro 10 puntos durante los primeros 24 minutos (contra 21 de la banca local) Los Celtics cerrarían mejor el cuarto gracias a una racha de 9-0 con la que se colocaban 59 a 53 al cierre de la primer mitad.
El inicio del tercer cuarto continuaba con una constante. Los dos equipos iban mermando su performance ofensiva. Ninguno de los dos equipos mostraba regularidad en el ataque, haciendo el partido mucho mas trabado, con largos periodos sin anotaciones, y las defensas sacando ventaja. Lo destacado para los locales, era que se mantenían de cerca en la batalla rebotera (talón de Aquiles de la franquicia de Massachusetts en esta temporada) que les permitía tener a los Hornets a raya y seguir arriba en el marcador. Durante ese tercer periodo, el resultado fue 21-18 a favor de los locales, que entraban de esa manera al último cuarto con una ventaja de 9 unidades.
En los últimos 12 minutos, las luces se posaron (como viene sucediendo en el último tiempo con el conjunto verde) sobre Isaiah Thomas. El pequeño gigante continuo con su faena en los momentos decisivos, aportando 17 puntos en el último cuarto (35 en su cuenta personal) dejando marcas como esta.
Isaiah Thomas cannot be stopped. #NBAVote pic.twitter.com/HwS5rEjQvg
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De esta manera, los Celtics se llevaron un sólido pero trabajado triunfo por 108 a 98 prolongando su racha a 7 partidos consecutivos ganados como local. Por parte de los Hornets, una nueva derrota en calidad de visitante, que los ubica con un registro de 20-21 y apenas un saldo de 8-14 en condición de visitante. Los locales tendrán su próximo encuentro el Miércoles cuando reciban a los New York Knicks, mientras que los Hornets serán visitados por los Portland Trail Blazzers el mismo día.