Los Washington Wizards llegaban anoche a Charlotte en un gran momento de la temporada, tal y como muestran sus últimos resultados, traducidos en victorias a excepción de ese último partido ganado sobre la bocina por Marcus Morris y sus Pistons. Los Charlotte Hornets, después de un duro comienzo de año 2017, venían de ganar los tres últimos partidos, algunos de mucho mérito, como la contundente victoria ante los Raptors.
Anoche los Wizards fueron superiores, confirmaron que han olvidado el mal comienzo de temporada, y consiguieron llevarse la victoria de la cancha de los Hornets. John Wall volvió a ser el líder del equipo, anotando 24 puntos junto a 7 asistencias. Le acompañó un partido más Markieff Morris, que acabó con 23 puntos y 8 rebotes, en una gran noche en el tiro del ala pívot de los Washington Wizards. Bradley Beal y Otto Porter Jr. también contribuyeron a la victoria con 18 y 14 puntos respectivamente, firmando un doble doble Porter con 13 rebotes.
Segundo gran partido con consecutivo para @Keefmorris, esta vez con 23 puntos y 8 rebotes. (📹 @WashWizards)pic.twitter.com/RotN88Q0DJ
— Blog From DC (@BlogFromDC) 24 de enero de 2017
Por su parte, los Hornets no tuvieron su mejor día lanzando a canasta. Nico Batum fue el claro ejemplo, acabando solo con 4 puntos en 2 de 9 en tiros de campo, o los 3 de 10 de Frank Kaminsky para 8 puntos. Los 7 de 24 de Kemba Walker también se notaron, aunque acabó siendo el máximo anotador con 21 puntos. Marco Belinelli lo intentó desde el banquillo, con 18 puntos.
Los Washington Wizards, superiores casi todo el partido
El partido estuvo marcado por la superioridad de los Wizards desde el comienzo. Ya desde el primer cuarto, los de la capital de Estados Unidos lograban ir por delante en el marcador, guiados por unos 12 primeros minutos soberbios de John Wall, en los que consiguió 13 puntos. Durante el segundo cuarto, los de Scott Brooks alargaron su ventaja por encima de los dobles dígitos, con Morris cogiendo el testigo de Wall y anotaba 12 puntos en este periodo. El partido se iba 60-48 favorable a los Washington Wizards.
A la vuelta del descanso, los Wizards lograban mantener la ventaja a base de triples de Beal y Porter, hasta que un arreón de los Hornets en los últimos dos minutos les colocó de nuevo en el partido. Seis puntos abajo y doce minutos por delante para intentar remontar el partido. Pero rápidamente, en los primeros minutos del último cuarto, los capitalinos volvían a poner el colchón de los 10 puntos, alargando la ventaja hasta los 16 puntos gracias a un parcial de 11-0. Desde ese momento, los Washington Wizards ya no dieron opciones de pelear por el partido a los Hornets, y Wall cerraba el marcador a base de tiros libres y sellaba la victoria, 109-99.