Deron Williams ya ha dejado de formar parte de los Dallas Mavericks. El base texano ha estado todo el día entre los rumores de traspaso pero, finalmente, no salió antes del límite y la franquicia ha optado por cortar su contrato, pasando a la lista de waives (momento donde cualquiera puede reclamar su contrato) para convertirse en agente libre dentro de unos días si nadie quiere asumir su salario.
Mavs waive Deron Williams
— Marc J. Spears (@MarcJSpearsESPN) 23 de febrero de 2017
Rick Carlisle, Donnie Nelson y Mark Cuban tendrán una papeleta complicada cuando tengan que dar las razones que les han llevado a tomar esta decisión: el compromiso de D-Will con la franquicia y la ciudad era total, era el base titular, tenía peso en el vestuario y estaba desempeñando un baloncesto realmente bueno. Periodistas cercanos a la franquicia indican que las intenciones de los Mavs es convertir a Yogi Ferrell en su base titular y «ofrecieron» a Williams la opción de convertirse en agente libre si no estaba contento con el nuevo rumbo del equipo.
Actualmente —y con mucha lógica—, múltiples equipos de la NBA se han mostrado interesados por hacerse con los servicios del veterano base; pero todos ellos creen que D-Will ya ha decidido unirse a los Cleveland Cavaliers. Por lo que los vigentes campeones ya conseguirían a su añorado base suplente de garantías.
Yo sigo abriendo una puerta a JAZZ.
El dinero no le importará, va a cobrar lo que resta de sus 10 millones de contrato de los Mavs, de los Nets y de… probablemente se vaya por el mínimo y un año y negociará un contrato más adaptado a sus aptitudes en verano. Pero ahora, al 80%, parece que se irá a los Cavs
Eso parece sí. Para mi es una mala noticia porque muchos de los agujeros de CAVS se tapan si se produce el fichaje. Pero Deron es uno de los mejores bases de la última decada y después de lo que ha pasado merece una oportunidad de pelear por algo grande, algo que desde 2008 no tiene.
La verdad que es poco habitual que corten a un jugador que está dando este rendimiento y puede llegar a «adulterar» la competición. Pero son cosas que pasan