Este verano se presenta clave en el proceso de reconstrucción de los Brooklyn Nets. Tanto en el draft como en la agencia libre, la franquicia tendrá que realizar los movimientos adecuados para seguir con el proyecto. A pesar de la dificultad a la hora de atraer a jugadores a los Nets, el base titular del equipo, Jeremy Lin, no está de acuerdo.
Tras un año en donde la prioridad era la de dar rienda suelta a los jóvenes y firmar a jugadores con contratos bajos, y que demostrasen su habilidad en la mejor liga del mundo, este verano toca dar un paso más en el ansiado proceso de reconstrucción.
Por un lado, los Brooklyn Nets, de la mano de Sean Marks, se han movido en busca de primeras rondas, consiguiendo la primera de Washington Wizards a cambio de Bogdanovic. Dispondrán de esta y la de los Boston Celtics. Se tratan de dos rondas que se encuentran en la posición 22 (WAS) y 27 (BOS), a las que se une la 57, también de Boston.
Por otro lado, en lo que respecta a la agencia libre, la franquicia dispone de un margen salarial de 30 millones de dólares. Pero aquí radica la dificultad de atraer a los agentes libres. El verano pasado también había margen, pero no se consiguieron grandes nombres. El base de la franquicia no ve difícil este hecho:
“Sinceramente, no creo que va a ser tan difícil. En primer lugar, es Brooklyn, es Nueva York. En segundo lugar, todo el mundo puede contar que esta cultura es completamente diferente. Creo que lo que hicimos después del descanso del All-Star ayudará, pero también, los jugadores quieren ser tratados de la manera correcta y yo sé que definitivamente hay mucho interés”.
Dentro de la franquicia, y todo lo que se genera alrededor, hay mucha confianza por la forma en la que se han hecho las cosas. Por fin hay sensación de proyecto de futuro, no como otros años. De la mano de Sean Marks y el entrenador, Kenny Atkinson, ha despertado cierto interés en los jugadores. Lin lo sabe:
“Los jugadores están pidiendo mucho de nosotros porque vieron la forma en la que Kenny (Atkinson) entrenó, vieron cómo estos chicos (nosotros) jugaban noche tras noche, cómo jugamos de manera generosa, que quieren ser parte de eso. Ya ha habido mucho interés … la gente está haciendo preguntas ya sea para mí para Brook o de otros jugadores. No creo que va a ser tan difícil”.
Goodwin, agradecido con los Nets
Otro de los aciertos de la gerencia ha sido la firma de jugadores procedentes de la D-League. Quincy Acy y Sean Kilpatrick han sido dos ejemplos de dichos movimientos. El último acierto fue la incorporación del escolta Archie Goodwin. Llegó con contrato de diez días (firmó dos), y finalmente se ha hecho con uno de un año, con opciones de renovarlo en distintas fechas. Con tan sólo 22 años, y cuatro años de experiencia de NBA, fue firmado procedente de la liga de desarrollo, para los Greensboro Swarm.
El escolta se mostró tremendamente agradecido y con esperanzas de cara a la temporada que viene:
“Este verano va a ser enorme para mí y para nosotros. Tengo mucho trabajo por hacer a partir de hoy estoy cerrando mis móviles y las redes sociales hasta el comienzo de la próxima temporada. Estoy encerrado y listo para demostrar a todos los que dudaron de mí que “todos cometieron un gran error”.
En 12 partidos que ha disputado con los Nets, ha promediado 7,9 puntos, 2,3 rebotes y 1,9 asistencias en 15,3 minutos por encuentro. Todo ello con unos porcentajes del 55,7 % en tiros de campo, por un 30,8 % desde la línea de tres.