Expectativas altas y pocas oportunidades
Elegido en la novena posición del draft de 2014, por delante de jugadores como Elfrid Payton, Dario Saric, Zach LaVine, Jusuf Nurkic o Nikola Jokic, Noah Vonleh se ha visto desde el primer momento superado por las expectativas que él mismo se había labrado. En su temporada de novato, como jugador de los Hornets, apenas disputó 10,4 minutos en 25 partidos, por lo que no pudo siquiera mostrar su potencial o justificar su elección.
Un año después de ser elegido, en la noche del draft de 2015, Noah Vonleh y Gerald Henderson se marchaban a Oregon a cambio de Nicolas Batum. Ciudad nueva y oportunidad de destacar en un equipo que se quedaba huérfano de estrellas consagradas y que parecía abocado a un tanking philangélico, algo que sorprendentemente no llegó a ocurrir. En principio, los registros no parecían para nada decepcionantes: 78 partidos, 56 como titular, prácticamente una decena de rebotes por cada 36 minutos en pista… pero toda moneda tiene dos caras y, en este caso, preocupaba especialmente la más oscura. A pesar de que Vonleh contaba con más minutos y tenía más hueco para empezar a destacar, algunas estadísticas revelaban un desarrollo nulo en el campo que verdaderamente interesaba: 42 % de efectividad en solo 3 tiros y medio por noche para un discreto promedio de 3,6 puntos por duelo. En el apartado colectivo, un dato por encima del resto: con Vonleh en pista, los Blazers promediaban 4 puntos menos por cada 100 posesiones.
Continuidad frustrada y cambio esperanzador
A pesar de la falta de brillantez, Noah Vonleh se plantaba en su tercera temporada NBA con poco más de 21 años: menor que Buddy Hield, Kris Dunn y Malcolm Brogdon. Esta vez, la oportunidad de destacar se preveía más real. La gerencia de Portland plasmaba su confianza en el bloque joven mediante renovaciones como las de Crabbe o Meyers Leonard, dignas de dotar de atrezzo a cualquier vídeo musical ostentoso basado en el recuento o la precipitación masiva de cantidades ingentes de papel moneda. La intención parecía clara: acumular de activos jóvenes como piezas intercambiables, posibles estrellas del futuro y, sobre todo, acompañantes dispuestos a aprender en un presente cargado de ilusión y competitividad inesperadas.
Pero, a pesar del intento de continuismo, el equipo confeccionado para esta temporada resultó no ser igual al de la pasada. Hoy en día es evidente que los Blazers no podían pretender seguir ganando a rivales reforzados sin cambiar nada. ¿La buena noticia? Los grandes males se terminaron gracias a un bosnio bastante grande. ¿La mala? Hubo que esperar demasiado, por lo que será inevitable que perdure cierta decepción en el fan de los Blazers cuando se recuerde el periodo previo al All Star. Temporada algo desconcertante, faltas de regularidad, consistencia y concentración mezcladas con momentos de esplendor.
En medio de esta montaña rusa de altibajos, Noah Vonleh se las ha arreglado para encontrar su hueco. Intercalando buenas y malas rachas, alternando partidos dispares, el ala-pívot de 21 años se ha ganado por fin un papel importante en la rotación de Terry Stotts. Actualmente, Vonleh es el acompañante de Jusuf Nurkic en una plantilla hipotéticamente sana. Buena prueba de ello es lo que ha ocurrido estos últimos días debido a la lesión del bosnio: Vonleh ha sido titular en todos los partidos, con Meyers Leonard y Al-Farouq Aminu repartiéndose el puesto dejado por Nurkic en el quinteto inicial.
Revolución individual
Llegó el All Star Weekend y los Blazers acumulaban un récord de 23 victorias y 33 derrotas. Tras el partido de las estrellas, registro de 16-7 para la franquicia de Oregon. Todo el mundo sabe que en la mejora han sido determinantes la llegada de Nurkic y la recuperación de Lillard, pero… ¿cuántos se han fijado en el inmenso salto de Vonleh? Aquí está la comparación entre dos Noahs totalmente distintos:
categoría | antes del ASG | después del ASG |
minutos/partido | 13,2 | 24,3 |
puntos/partido | 3,2 | 6,7 |
rebotes/partido | 4,2 | 7,2 |
asistencias/partido | 0,2 | 0,8 |
% tiros de campo | 40,7 % | 57,5 % |
% tiros libres | 55,8 % | 70,6 % |
true shooting % | 45,3 % | 66,1 % |
off. rating | 90 | 121 |
def. rating | 112 | 108 |
+/- | -10,3 | +5,3 |
Para entender lo ocurrido, hay que tener muy en cuenta el que ha sido uno de los traspasos más importantes de esta temporada. Se trata, cómo no, del intercambio de cromos entre Denver y Portland. Los Nuggets se llevaron a Plumlee, jugador más experimentado que Nurkic, más desarrollado y a la vez capaz de cubrir distintos apartados sin necesidad de jugar muchos minutos para rendir. Los Blazers, en cambio, arriesgaban el valor seguro que había en Mason Plumlee a cambio de un proyecto de futuro que había visto su progresión cortada por la explosión de Nikola Jokic. Parecía que Portland sacrificaría victorias, y seguramente los playoffs, a cambio del talento del joven bosnio.
Sin embargo, como segundo hemistiquio del ahora famoso clickbait, el resultado sorprendió: Jusuf Nurkic siendo protagonista de la racha que finalmente sirvió para meter a los Trail Blazers en playoffs y, por supuesto, la aparición de Noah Vonleh. Cuando Plumlee ocupaba el puesto de pívot titular, una inconsistencia preocupante truncaba cualquier opción de entrar en una racha positiva. Los Blazers caían en partidos igualados y, sobre todo, desperdiciaban ventajas que a priori parecían definitivas. Con Nurkic y Vonleh convirtiéndose en la pareja interior predilecta –Noah ha sido titular en 38 de los últimos 39 partidos-, los Blazers han alcanzado el equilibrio o, al menos, lo más cercano a ello.
Mejora colectiva
registro de Blazers menos registro rival por cada 100 posesiones | Vonleh
Plumlee |
Vonleh
Nurkic |
puntos | -13,3 | +12,8 |
tiros de campo anotados | -2,4 | +6,6 |
triples | -6,1 | +1,3 |
rebotes defensivos | -4,2 | +10,0 |
rebotes ofensivos | +6,0 | +2,8 |
% total de rebotes | +2,2 | +14,1 |
tapones | -3,3 | +0,8 |
Un cóctel de datos refleja a la perfección los problemas defensivos de los Portland hasta el traspaso: mientras Plumlee y Vonleh coincidían en pista, los Blazers anotaban menos tiros de campo, taponaban menos y atrapaban menos rebotes defensivos que el rival. Con la llegada de Nurkic y el aumento de minutos de Vonleh, la tendencia se ha revertido por completo: los Blazers tiran con mayor acierto que el rival, anotan más triples, taponan más y atrapan un 14 % más de rebotes que el rival.
Futuro y expectativas
Los Trail Blazers han llegado ya a Oakland para enfrentarse a unos Warriors que, según cierto software, tienen más del 99 % de posibilidades de llevarse la serie. Noah Vonleh es demasiado joven aún, por lo que parece que no contará con mucho protagonismo en una cita dedicada a las estrellas y aquellos veteranos conocidos por su capacidad para decidir el desenlace de cada duelo. Sin embargo, ¿existe mejor forma de confirmar una evolución que teniendo un buen papel contra el mejor equipo de la liga? Para Vonleh, hoy en día, la respuesta es un rotundo no.
Noah Vonleh tiene solo 21 años y ya ha demostrado que puede ser parte importante de un equipo de playoffs. Esta temporada, sus números han crecido al mismo tiempo que han mejorado las estadísticas del conjunto. Los jugadores más jóvenes, como Vonleh, acaban de empezar a aprender de los jugadores más experimentados, que a su vez serían los más jóvenes en otras plantillas de la liga. Evan Turner, de 28 años, es el mayor; a Damian Lillard, de 26 años, se le considera líder indiscutible de la franquicia y estrella consagrada de la liga. Con una plantilla cargada de talento joven -CJ McCollum, Jusuf Nurkic, Moe Harkless, Allen Crabbe, Noah Vonleh-, los Portland Trail Blazers pueden permitirse creer que lo mejor está por llegar.
Que bien escribe usted, Sr. De Prado.
Gracias, señor… Boss.
Espero que esa progresión continúe la temporada que viene.
Evidentemente Turner los minutos de VONLEH se han aumentado, pero no por meritos, sino porque a Portland no le queda nada más en la banca que poner. Desgraciadamente yo no atisbo mejora alguna y me temo que cuando el roster vuelva a estar completo en Otoño este chico regresará al ostracismo.
Respecto a Nurkic tampoco soy mucho más optimista.
No comparto esa opinión. El Vonleh actual me parece bastante más atrevido e incisivo que el de hace tres meses. Antes no tenía apenas influencia (para bien) en el juego cuando entraba; ahora aporta en lo que puede y, lo más importante, no resta. Yo le seguiría dando minutos la temporada que viene.
Y lo de Nurkic… ¿por qué lo dices? Ha sido la solución a los males, o eso parece. Más no se le podía pedir.
Coyunturalmente es cierto que NURKIC les ha venido muy bien. Ha aterrizado en el momento justo; sin embargo la regularidad no es su fuerte, y dudo mucho que se adapte al sistema de Stotts. No creo que el año que viene se permitan las relajaciones defensivas de este año en Portland… veo a EZELI titular siempre. Sobre VONLEH seguro que tú has visto más partidos que yo de Blazers desde el All-Star y ojala tengas razón. Lo necesitan.
Ezeli… buf, ojalá. Ezeli nos daría un plus muy útil. Pero ni siquiera sé si volverá, a estas alturas el milagro sería que recuperase su nivel. Todo se verá; esperemos que Ezeli o Vonleh (o, mejor todavía, los dos) puedan ayudar a mejorar el año que viene, sobre todo en lo que dices: la defensa.
Ezeli? En serio? Quién es ese? Al paso que va terminará dejando el baloncesto, además de que es mucho más limitado que Nurkic en todo, salvo en defensa, donde no hay mucha diferencia
Excelente articulo,me ha encantado la parte que pones: cierto software da 99% por cierto de posibilidades a los Warriors pero está claro que no es así
Nos vemos en el Reino de Sasha Kaun
a mi este jugador me encantaba cuando vi los videos de su draft se lo merece bravo!!!
Gran articulo, Álvaro, esperemos que esto siga así el año que viene y vaya a más, porque tiene que ir a más
Aunque esta mejoría no llegaría si no viene Nurkic desde Denver, eso fue clave
Gran articulo, Álvaro, esperemos que esto siga así el año que viene y vaya a más, porque tiene que ir a más
Aunque esta mejoría no llegaría si no viene Nurkic desde Denver, eso fue clave
Debe mejorar sobre todo en defensa, aprovechando sus largos brazos para taponar tiros