Golden State Warriors consiguió añadir a su plantilla a uno de los mejores anotadores de la historia de la competición. Con Kevin Durant, Stephen Curry, Klay Thompson y Draymond Green en la plantilla no podría venirse otra cosa a la cabeza que ataque constante y muy peligroso. Tres de los mejores tiradores de la historia juegan en este equipo y forman una de las ofensivas más peligrosas de la historia.
Sin embargo, no es el ataque su única virtud. Los Warriors han conseguido mantener en la sombra una de sus mejores cualidades y consiguieron dar buena prueba de ello en el primer partido de las Finales. A pesar de estar en el top cinco defensivo en los últimos cinco años y haber sido el mejor equipo estadísticamente en tiros de campo del rival, nadie hablaba de la defensa de estos Warriors.
El primer partido de las Finales fue una auténtica exhibición defensiva de este equipo, la cual utilizaron para destrozar a su rival. Los Cleveland Cavaliers han sido uno de los mejores equipos en el tiro durante los Playoffs con un porcentaje del 50,7 por ciento durante sus trece partidos disputados antes de llegar a las Finales, sin embargo, los Warriors consiguieron congelar su ataque y los redujeron a 34,9 por ciento en tiros de campo. Fue su peor porcentaje en toda la postemporada.
“Si continuamos con el mismo esfuerzo defensivo, vamos a ser muy difíciles de batir.” – dijo Klay Thompson.
Klay Thompson no estuvo fino en el tiro, únicamente consiguió anotar seis puntos, pero su defensa fue clave a la hora de la consecución de la victoria. Solo consiguieron anotar 1-12 tiros de campo cuando Thompson defendía y fue el mejor jugador al otro lado de la cancha a pesar de contar con el que será casi sin duda alguna el mejor jugador defensivo del año, Draymond Green.
Lo más hablado del primer partido fue la gran actuación de Stephen Curry y Kevin Durant, que consiguieron 66 puntos entre los dos. Su defensa no se quedó atrás, ambos defendieron varias posiciones y consiguieron poner en serios problemas a sus jugadores asignados. Kevin Durant como principal defensor de LeBron James hizo un trabajo excepcional; a pesar de los 28 puntos de James, consiguió ponerle las cosas muy complicadas en la pintura provocando numerosos fallos. Curry defendió principalmente a J.R. Smith y Deron Williams, provocando numerosas pérdidas y consiguiendo sumar tres robos de balón.
Los Warriors, como equipo, consiguieron encontrar la manera de tirar por los suelos cualquier tipo de intento de ataque de los Cavs, desde frustrar a una de las piezas de su ‘Big Three’ como Kevin Love hasta hacer desaparecer por completo a su mejor incorporación de esta temporada, Kyle Korver, que no consiguió anotar ni un solo tiro en sus 19 minutos de juego.
Gran artículo Juan!!!!!! habrá quienes califiquen de malo el partido de klay Thompson….. en fín….